Las pastillas del abuelo llegan al streaming con nuevo disco

La banda se tomó su tiempo pero finalmente decidió hacer una presentación en plataformas, con una calidad técnica y lumínica que promete dejar la vara muy alta

Las pastillas del abuelo llegan al streaming con nuevo disco
El tema "Interpretaciones" del nuevo disco refleja la vida en pandemia

El viernes 13 presentaron su último disco “2020” y esta noche realizarán un show por streaming en el ciclo “Se siente desde casa” en el Movistar Arena. El disco tiene cuatro cortes: El favor, que viene sonando desde hace varias semanas en las plataformas, Interpretación, Más lejos e Incontinencia verbal.

Si bien el año canceló varios proyectos, para Las pastillas del abuelo y, especialmente para Piti Fernández, ha sido un año de descubrimientos, lanzamientos y nuevos rumbos. Así como el nombre del disco “2020”, el número veinte se repite en varias de las producciones de Piti: Lanzó en Youtube e Instagram un ciclo llamado Momentos 2020, el 20 de septiembre se presentó en streaming como solista y hoy hace su presentación con Pastillas.

Acerca de eso, sus proyectos concretados y su cambios en el estilo de vida hablamos en esta entrevista exclusiva para diario Los Andes.

Hablemos del show por streaming que presentan hoy en el Arena

Bueno, va a haber un poco un recorrido de toda la banda siempre con el dilema de cuánto tiempo es mejor tocar. No sé si será un show de dos horas y media- como el de los Caballeros de la quema- o de 40 minutos. Esto va a ser una hora y media de temas que van a recorrer nuestra historia. Hay unos popurrí que armó Bochi Bozzalla para ir pasando a través de nuestros temas, recorriendo toda la historia de Pastillas del abuelo. Va a haber dos temas nuevos: Azúcar impalpable es uno de ellos y uno que se llama Neblina, que es el que estamos usando para los spots publicitarios. Va a haber un tramo del show que se va a poder disfrutar en el modo de “sonido inmersivo 8D”, me parece una barbaridad de dimensiones, pero es así. Así que muchas alegrías para el 20 de noviembre.

Estuvieron en el Cosquín Rock y vos hiciste algunos como solista ¿Se sienten cómodos con el streaming?

La comodidad es relativa porque venimos haciendo esto, es como un programa de televisión, muchas veces a mí me gusta plantearlo guionado y eso te hace extrañar menos a la gente porque entre canción y canción es el bache más fulero. La frialdad al final de las canciones es durísima. No sé cómo lo vamos a solucionar con Pastillas del abuelo, supongo que sufriremos el bache o diremos alguna que otra palabrita, pero son segundos en los que se siente la ausencia de la gente Va a estar bueno y seguramente va a ser cálido porque vamos a tratar de meternos en un escenario íntimo. Somos de los últimos que estamos haciendo esto y nos tomamos el tiempo para elegir el mejor lugar, que tenga una buena transmisión, tomarnos días de ensayo para que salga bien, generar alguna cosita nueva y aprender del asunto. A los que lo hicieron primero, además de que les haya salido bien, hay que felicitarlos por la audacia.

¿Te dio para componer durante la cuarentena? ¿En qué sentís que fuiste productivo?

Sí, pero música, no tanto líricamente. Estuve escribiendo mucho en los diarios de mis hijas y ahí les voy escribiendo su evolución. También tengo mi libreta donde voy tirando pensamientos sueltos que no terminaron en canciones. Hice dos temas al principio de la cuarentena, y luego no compuse más letras. Sí generé muchos riff, casi te puedo decir que el próximo disco solista viene de riffeo que hasta ahora no había. El primer disco solista Conmigo mismo es de folk canción y el segundo es más bien country blues. Generé como unos diez riff, casi puede ser un disco pero tengo que hacer las letras.

En este periodo lo que hice fue meter información (gesticula con los brazos hacía sí mismo) como loco, así que espero que este tramo de la primavera - verano me agarre sacando información.

El tema de la lírica no es lo que más te cuesta

Sí es lo que más me cuesta. Lo que sale está bueno pero no sale a borbotones, también es la pereza de sentarse a jugar con las palabras. Soy un poco inquieto y la inspiración llega pero debe encontrarte trabajando, como decía Picasso, y eso a mí me cuesta un poco.

¿Qué te dejó el 2020 a nivel general?

Me dejó salud. Tuve un despertar con la salud que no tuve en otros años y ahora tengo que generar nuevos hábitos y lo conocí de la mano de esta pandemia, con la crisis sanitaria. En este viaje, aprendí lo importante de alcalinizar la sangre, comer mejor. El plan cuidadosamente armado por una elite trillonaria para envenenarnos con cosas transgénicas, con carne muerta, con lácteos que no sirven para nada, harinas y azúcares refinados. Es una de las maneras de no pasar tanto por la farmacia donde no hay cosas que curen sino más bien cosas que cronifican enfermedades o tapan síntomas. A raíz del coronavirus, me metí a purificar el cuerpo y empecé a bajar de peso. Si hay algo que me dejó este año es eso: salud.

“Interpretación” es el video que mejor refleja la vida de millones de personas en lo cotidiano. ¿Lo pensaron como un video o fue saliendo?

Lo guioné yo, pero tenía baches y me ayudó mucho el editor Gogó, y Juan Comas. La idea era que aparezca la hora 2020, se refleje durante todo el día y que termine al día siguiente a la misma hora. Fue una idea de Juan Comas. Ahora queda un poco viejo, se hizo en un momento de la cuarentena en la que había una restricción muy fuerte, la mirada de la gente también era una restricción grande y el carácter de obligatorio era mucho menos flexible al principio de la cuarentena. Entonces mostrar un video con alguien saliendo tenía que ser para algo, tenía que ser para algo esencial. Ahora se ha disuelto un poco.

El cuadro que sale es la tapa del disco, ¿no? ¿De quién es?

Sí, es un cuadro que hizo el baterista, Juan Comas, que se está tirando a pintar como el baterista de Metallica, y la verdad es que está buenísimo. Hace tres discos que Juan se encarga del arte de tapa, desde Paradojas, porque yo lo abandoné en el medio de la producción de la tapa y él se encargó del DVD, el arte de tapa es alucinante con la cantidad de data que tiene sobre geometría sagrada.

Yo abandoné los artes de tapa en la mitad de Paradojas. Hice el de Crisis, el de El barrio en sus puños y el de Desafíos.

¿Por qué los abandonaste?

Creo que fui papá y me superó la situación. Fue el periodo en el que todos fuimos padres, ese disco tiene dos canciones para mis hijas. Creo que fue el hecho de haber sido padre que me dejó fuera de juego y le dije a Juan: “No puedo más, seguilo vos”.

En Youtube tenés un ciclo llamado Momentos 2020 con un montón de temas versionados ¿Eso en algún momento será un disco?

Sí, a mí me encanta. En esta cuarentena la libido la puse más ahí, más que en componer canciones, en versionar canciones que a mí me gustan. Y la verdad que sí las voy a sacar, al igual que La ciudad de la furia que la pude producir en un vivo el 20 de septiembre. Me divierte muchísimo versionar al country, al folk y al blues canciones, más que hacer temas propios. Lo próximo que se viene es Azúcar Impalpable y el show de Pastillas del abuelo, pero para el verano voy a tirar alguna canción solista que nos pueda acompañar y que sea un tempo veraniego. Después de eso estaré lanzando una seguidilla de Momentos 2020, y le va a tocar a la década del ’90. Algo hice con La renga, pero la mayoría son de la década del ’70, en el disco Conmigo mismo. En el disco Caminos bríos versioné temas de los ’80: Virus, La ciudad de la furia, algo de los Redondos. Y ahora en la próxima tanda voy a versionar temas de los ’90.

Pero también estás reversionando tus temas. La Doctora II pasó de ser una chacarera a ser un tema de country. ¿Qué pasó?

Lo voy a sacar el año que viene en vinilo, pero primero los voy a cortar. Los doce temas del disco van a ser corte. Muchos de esos temas los compuse en una coautoría con alguien. En cuero y en patas lo hice con Fabi Sauri; El cuento que cuentes, lo hice con Yair Biela. Hay cuatro temas que son de coautoría. Hay otros cuatro que son viejos, entre los que está La Doctora II, Hurtos de baúl, A medias y Contradicción que pertenecen a la vieja guardia. Y hay otros cuatro que son míos y nuevos. Así que son tres bloques de cuatro temas de coautoría, cuatro temas viejos hechos con alguien y cuatro nuevos míos.

La verdad es que el country me gusta, escucho una canción y la versiono para ese lado. Estoy a un country de ser un personaje de Capusotto.

¿Abandonaste los ritmos típicos como el candombe y el folklore?

Es que justamente ese universo es de Pastillas del abuelo, donde hay una zamba por disco que son increíbles, las hace Bochi. La letra de Ansiedad, que es una zamba impresionante, o La experiencia. El reggae, cosas que tienen que ver con el tango, la chacarera, el folklore, el rock, algo de jazz, bossa nova. Todo eso está en Pastillas.

Tenés una versatilidad muy amplia para todos los estilos

Pastillas tiene lugar para todo, para distorsiones más Joe Satriani, para temas más Fito Páez. Somos bastante variados todos y tenemos un lugar por igual. Acá (refiriéndose a su banda solista) me agarra el despotismo y tenemos un camino así chiquito para jugar.

Sos un millennial hecho y derecho, manejás redes, entendiste que había que deconstruir una concepción cultural muy arraigada. ¿Qué cosas cambiaron en vos en ese camino, a lo largo de tu vida?

El observador te cambia, algunos testimonios. Informándonos. También tengo una militancia muy cercana a través de mi mujer, entonces vas cambiando el observador y te vas poniendo en los zapatos de las chicas. Porque una cosa es darle lugar al género y otra cosa es ponerte en sus zapatos. Es muy difícil, pero es una metáfora para explicar la vida y cómo uno lo siente. La empatía con el movimiento, con sus logros, las conquistas, los fundamentos que son importantes, la cercanía con la causa. En el caso de los femicidios, no tiene goyete, es inentendible. Tengo dos hijas y veo eso en mí cuando voy por la calle y veo a una chica con un pañuelo verde y ya noto que ella se siente protegida con ese pañuelo. Espero explicarme bien: noto que las chicas van con otra seguridad. Y eso me hace sentir seguro por mis hijas, porque entiendo que esa herramienta no la tenían antes y mis hijas, dentro de catorce años van a tener una seguridad muchísimo mayor al caminar por la calle, que se está gestando hoy. Eso a mí me sirve mucho.

¿Hay músicos en tu familia? ¿De quién heredaste la pluma para las letras?

Mi viejo cantaba tangos muy amateur, pero es un tipo que convive con la música. Le gustaba cantar, andaba todo el tiempo silbando, me regaló el primer disco de Joaquín Sabina y ahí me mete un poco en la responsabilidad de las letras. Mi abuelo llegó a editar un libro con 50 poemas, Conmigo mismo, que tiene el poema del mismo nombre. Yo incluí tres poesías de él en el disco Conmigo mismo. Y mi vieja siempre fue una amante del teatro y los backstages de todas las obras. Estaba familiarizada con los vestuarios, los sketches y las coreografías. Así que ese era mi mundo, mi abuelo escribiendo, mi viejo con la música y mi mamá metiéndome en los escenarios con 4 o 5 años a actuar o cantar.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA