María Belén nació en Mendoza, creció en Buenos Aires y estudió en Rosario. Desde pequeña asistió a talleres que la animaban a crear con sus manos como dibujo y cerámica. Su primer acercamiento al mundo del diseño de indumentaria fue observando a su abuela materna, en Mendoza, y a su tía paterna, en Santa Fé; quienes tenían máquinas de coser y realizaban sus propias prendas de vestir. A muy corta edad y sin entender bien como era el procedimiento, le fascinaba ver como “ese montón de telas se transformaba en los trajecitos y vestidos que ellas después lucían.”
En su adolescencia heredó esas máquinas e incursionó de forma autodidacta un la creación de prendas. Algunos años después destinó su tiempo a capacitarse en Argentina y en el exterior, a la par que comenzó a gestar su marca: Dos Bananas. Se formó en diseño, dibujo artístico, moldería industrial y digital, producción de moda, asesoría de imagen y comercio exterior. Motivada por la vida y el deporte al aire libre e inspirada por la naturaleza y los paisajes, orientó su trabajo a determinar y destacar aspectos de su identidad de marca en todo el proceso productivo.
Entre viajes, surf y snowboard tomó la decisión junto a Matías, su pareja, de irse a vivir a la playa. En esta nueva etapa “bisagra” él se unió a la marca desde el desarrollo conceptual y ella transitó la conexión más sustancial y representativa de su “niña artista”. Desde pequeña había sentido una atracción particular por los “jardineros”, algo que de más grande siempre buscaba y le costaba encontrar. Decidió entonces trabajar en esta monoprenda con el mayor nivel de detalle y precisión posible. Así, desde hace seis años y tras un largo proceso de perfeccionamiento en la moldería, este producto caracteriza a la firma con reversiones y auténticos detalles.
Características que dan identidad a la marca
Desde el inicio la premisa fue trabajar con tejidos ciento por ciento naturales y crear prendas holgadas que permitieran el movimiento con libertad. Una de las características diferenciales de las prendas son sus detalles interiores: aquello que ve principalmente quien la viste y que está en contacto directo con la piel, tiene un particular trabajo de géneros y estampados. Otro aspecto sustancial de la marca es que desarrolló su propia curva de talles inspirada en medidas reales, que abarca desde el XXS hasta el XXL. De esta forma, la variedad de modelos y talles está pensada para que cada cual encuentre la comodidad en su mejor versión. Por otro lado, la marca cuenta siempre con una “mini colección exclusiva” formada por prendas de autor únicas e irrepetibles. Finalmente, el packaging está creado con bolsas de lienzo reutilizables y las etiquetas son ecológicas con semillas plantables.
La gran fortaleza de Dos Bananas es la simpleza de su esencia, reversionando constantemente una monoprenda desde la perdurabilidad de la misma para que sea utilizada cada vez que uno quiera por gusto y no por tendencia. Trabajar en la atemporalidad de los productos, evitando el consumo indiscriminado y respetando los tiempos reales: “Que no nos corra la moda y las prendas desaparezcan al finalizar una temporada”.
Naturalmente, los intereses de María Belén y los de su marca fueron nutriéndose de los mismos valores. Comunicacionalmente, el concepto de simplicidad se extiende a aquellas personas y situaciones elegidas para dar a conocer la firma y los productos: desde la diseñadora misma en su vida cotidiana como principal embajadora; hasta hombres, mujeres y niños en contacto real con la naturaleza y lejos de las superproducciones.
Luego de regresar al país después de un período de tiempo en una localidad playera del vecino país de Chile y tras reconfigurar el modelo de negocio en pandemia, Belén y Matías trabajaron en el posicionamiento de la marca a nivel nacional. Con gran aceptación y repercusión, residiendo actualmente al sur de Mar del Plata y con una tienda exclusivamente virtual, comercializan sus productos en todo el territorio nacional y exportan al exterior. Dos Bananas exporta no solo prendas sino un estilo de vida. Una marca que gestiona su identidad íntegramente, desde el uso de los recursos con consciencia, el consumo responsable y la promoción de la conexión con la naturaleza.
