Después de haber conseguido 3 premios Óscar por su maquillaje, personaje principal y secundario, la historia que dirige Jean-Marc Vallée llegó a Netflix y resulta la oportunidad perfecta para disfrutar de una temática atemporal y a la vez, que refleja mucho una problemática actual.
McConaughey interpreta al cowboy Ron Woodroof, un vaquero que llevaba una vida de excesos en cuanto a drogas y sexo, y luego de una descompensación sus análisis constatan que tiene VIH y que le quedan 30 días de vida.
Con personajes ficticios que suman a la historia real contada en 1992, veremos a Woodroof buscar sobrevivir a toda costa probando medicamento tras medicamento para curarse de su enfermedad.
Esta desesperación lo lleva a probar drogas ilegales en Estados Unidos pero que tendrán un efecto positivo a lo largo del tiempo, llevándolo a vivir mucho más de lo que le sentenciaron.
Lo rico de esta historia es que se centra en el desarrollo del personaje, él será el foco principal, pasando de ser un cowboy homofóbico a buscar a toda costa una cura para el SIDA, ayudando a gays, travestis y todo paciente contagiado de VIH.
Más allá del tema, no estamos frente a un drama que contantemente busque lo negativo de la situación, sino que ambos personajes principales serán una mezcla perfecta para encontrarle un tono divertido y activo a la trama, por momentos sí dramático, pero que tiene sus momentos de relax.
El personaje de Leto resulta ser muy interesante, una travesti que recurre a sus vicios y buena voluntad para ocultar una vida de sufrimiento detrás. Y Mathew logra un avance en su personaje que es excelente, por momentos sensible y débil donde realmente hace el proceso de entender lo que significa padecer de SIDA. Creo que definitivamente, este filme marcó un antes y un después en la carrera actoral de ambos.
Veremos a ambos actores con un aspecto que no es habitual, delgados hasta los huesos y consumidos por una vida que sin dudas no era la que esperaban. Rabia, dolor y angustia son sentimientos que atraviesan al personaje, y también al espectador.
Durante los años ’90, muchas producciones se refirieron a la realidad que vivían las personas que contraían SIDA. Filmes como Philadelphia han abordado el tema del VIH, aunque esta producción tiene la particularidad de que, además de la enfermedad, apuntan a la complicación y fuerte lucha contra las organizaciones, en este caso farmacéutica, que se negaban a dar medicamentos para combatir la enfermedad.
Una fuerte crítica a la industria farmacéutica que, a costas de obtener una ganancia, proporciona medicamentos a los enfermos que, en lugar de ayudar, empeoran su situación.
Es una película que no es perfecta, pero es fresca, dinámica y tiene una temática que resulta muy atractiva. Una buena opción para este fin de semana.
El club de los desahuciados (Título original: Dallas Buyers Club). 2013. Estados Unidos. 117′. Dirección: Jean-Marc Vallée. Elenco: Matthew McConaughey, Jared Leto, Jennifer Garner, Bradford Cox, Dallas Roberts. Disponible en Netflix. Nuestra opinión: Buena.
