Existen miles de maneras de hacer cookies saludables; pero esta receta es infalible. La avena es un súper alimento con alta cantidad de fibra que nos ayudará a conseguir unas galletitas no solo deliciosas sino que también llenas de energía y nutrientes. En esta nota, te enseñamos como hacerlas.
Las cookies caseras son ideales para comer fuera y dentro de casa; ya sea en el colegio, el trabajo, la facultad o en el sillón con unos buenos mates. Son un alimento práctico que, hechas con ingredientes nutritivos, pueden convertirse en tu nuevo desayuno o merienda saludable.
En esta ocasión, te enseñamos a hacer unas cookies de avena que, lejos de ser desabridas y aburridas, están llenas de sabores y llevan chips de chocolate y frutos secos: una combinación exquisita para el paladar.
¡Comencemos con la receta!
Esta preparación es obra de Paulina Cocina, influencer gastronómica que enseña en sus redes sociales cómo cocinar fácil, rico y con pocos ingredientes en casa. Nosotros le agregamos nuestro toque personal con los chips y los frutos secos.
Ingredientes
- 115g. de copos de avena
- 50g. de harina (puede ser harina integral)
- 75g. de azúcar negra (puede ser blanca)
- 50ml. de aceite
- 1 huevo
- 1 pizca de sal
- 1 cdita. de esencia de vainilla
- Chips de chocolate, almendras y nueces picadas cantidad necesaria
Procedimiento
- Batir el huevo y mezclarlo con el azúcar hasta que quede una preparación cremosa.
- Agregar el aceite y la esencia de vainilla y unir bien.
- Incorporar la harina, la pizca de sal y los copos de avena.
- Agregar los chips de chocolate y los frutos secos.
- Unir bien con las manos hasta que quede una masa compacta.
- Llevar a la heladera unos 20 minutos hasta que la masa para las galletas esté bien fresca.
- Con las manos untadas con un poco de aceite, formar bolitas y aplastarlas formando las galletas de avena. Colocarlas en una fuente de horno. No hace falta que tenga manteca o aceite.
- Hornear unos 10-12 minutos a 180ºC, hasta que las galletas de avena vean doradas por debajo (si se ven hechas por arriba, pueden quemarse abajo).
Dice Paulina que no hay que hacerse problema si al sacarlas parecen un poco blandas: algo importante sobre esta receta de galletas de avena es que tienen un truco para que queden crujientes.
Cuando salen del horno, hay que dejar que se enfríen un rato para que se endurezcan con fuera y queden crujientes; mientras que por dentro queden suaves y sabrosas.
