Se hizo esperar pero llego nuevamente a los cines la trilogía de El señor de los anillos. Tras 20 años del estreno de la épica saga de la Edad Media, veremos nuevamente a los hobbits, elfos, enanos y magos en la pantalla grande.
Al parecer, dos décadas no son suficientes para que la nostalgia y el amor por esta historia de Tolkien hayan cesado. A partir de este jueves y por tres semanas, estarán disponibles las películas de esta saga que dejó fanáticos alrededor de todo el mundo. Esta primera semana será el turno de El señor de los anillos: La comunidad del anillo.
Las entradas para las tres partes de la historias dirigida por Peter Jackson ya se pueden adquirir en la preventa de los cines mendocinos.
El nacimiento de una leyenda
En 2001, el Festival de Cannes adopta esta saga arriesgada pero prometedora. Un joven Peter Jackson con poca experiencia en dirigir se embarcó en este desafío que más tarde lo posicionaría como uno de los grandes directores de la industria.
En principio, se trataría de una película de dos horas de duración que recopilaría la trilogía completa, aunque Jackson pidió un voto de confianza y aseguró que sería inviable llevar adelante algo así. Filmada mayoritariamente en Nueva Zelanda, el proceso total de la trilogía tuvo una duración de 8 años y recaudó más de 2900 millones de dólares.
“La parte más difícil fue el guion. Sin ninguna duda, la escritura fue una completa pesadilla”, aseguró el director en la presentación de la película. Jackson y su esposa Walsh contrataron a Philippa Boyens y Stephen Sinclair para formar algo que sería la clave del éxito: dividir la historia de Tolkien en tres unidades de sentido que pudieran estrenarse en años consecutivos, en lugar de optar por transformar cada uno de los libros en una película.
Esta trilogía es una de las adaptaciones más aclamadas de la historia, debido a que su cinematografía no pierde la esencia que la literatura busca transmitir. “La forma de escribir de Tolkien es tan vívida que puedes imaginarte la película”, aseguró en Cannes. “Puedes imaginar los ángulos de cámara, el montaje… De alguna manera, se va desarrollando por sí sola”.
Volver al cine y presenciar nuevamente la llegada del anillo de poder a las manos de Frodo y acompañar al hobbit por su viaje a la destrucción, será nostálgico para toda una generación. Hoy, 20 años después, revivir en pantalla grande la emoción que transmite cada toma, cada escena y cada personaje, será difícil de superar por la serie que Amazon Prime Video planea llevar a su plataforma este año.
En diciembre de 2001, Sam expresó un sentimiento que nos marcó por dos décadas: se dio cuenta de que, si daba un paso más, sería lo más lejos que habría estado nunca de su hogar. 20 años después, sentimos que fue ayer cuando emprendimos el viaje con los hobbits en la aventura por la destrucción del anillo, y seguirá siendo así.
El señor de los anillos es de esas películas que nos recuerdan el antiguo ritual de comprar una entrada, sentarse en la butaca y perder la noción de la realidad que afuera azota al mundo.