¿Una película de terror argentina? Que sí las hay. En ocasiones, muy buenas. Y le cabe a Demian Rugna haber dirigido “Aterrados”, una película inquietante, perturbadora, llena de imágenes que no nos dejarán dormir y que merecidamente trascendió a Netflix y cualquiera puede verla haciendo solo un clic. Vamos por partes.
Decíamos que es una película inquietante, porque logra llevarnos hacia un clima de absoluto enrarecimiento: esto es, irnos distorsionando la realidad hasta situarnos en una insoportable incomodidad. Algo que toda película de este género debería aspirar a lograr, aunque en general se opta por la salida sangrienta y espectacular (que es más fácil).
Si a eso le sumamos un buen suspenso y unos efectos especiales que no son abusivos y que, además, están bastante decentes, “Aterrados” nos promete una buena sesión de sustos.
La historia nos cuenta sobre una extraña seguidilla de eventos paranormales en un tranquilo barrio porteño y la siguiente investigación de tres especialistas, que van hasta el vecindario y cierta noche deciden ver qué está pasando en tres casas distintas.
En algunas escenas que involucran sangre, que en otro director podrían haber sido un chapuzón innecesario de gore, Rugna prefiere una especie de simpleza perturbadora, que adquiere toda su fuerza a través del concepto: el uso de un sencillo movimiento insistente, o incluso la ausencia de movimiento, es para él la mejor forma de condensar el horror.
En esa estética (un ¿terror conceptual?) Rugna se acerca a películas que han revitalizado el terror tal como lo conocíamos, como “Hereditary” o “Midsommar” de Ari Aster. Aunque no: al momento de filmarla, Rugna no conocía a ese director, pues su película es de 2017. En cambio, si hay que buscar un linaje, ése es el de “Poltergeist” o “Rec”, entre otros.
El director acierta también en el ritmo de la película, pues mantiene muy bien el suspenso. De hecho, logra hacernos entrar rápidamente en la historia y sentimos la tensión desde los primeros minutos. Aunque use eventualmente el demagógico “jump scare”, construye el terror desde otros elementos y esa creatividad se agradece.
Puede que el final no sea lo mejor resuelto, pero en las películas de terror -sobre todo en las películas de terror- lo importante es el camino hacia él. En este sentido, “Aterrados” cumple con lo que promete.
La ficha
“Aterrados”. Terror. Argentina, 2017. 87′, SAM 16. Dirige Demian Rugna. Actúan Maxi Ghione, Norberto Gonzalo, Elvira Onetto. Disponible en Netflix. Nuestra opinión: buena.
