El miércoles 5 agendó todos los paros que se podían hacer en los distintos sectores estatales mendocinos.
La movilización de los docentes, que postergó el inicio de clases, coincidió con una huelga generalizada en la Salud impulsada por Ampros y ATE, en todos los sectores de la UNCuyo (Fadiunc), en la administración central (Sitea y ATE), municipales, Tribunal de Cuentas, Judiciales, organismos autárquicos y descentralizados.
La medida de fuerza afectó la prestación del servicio de cada uno de ellos y abrió la posibilidad de continuar con más manifestaciones según lo decidan la semana que viene. Todo depende de las próximas negociaciones que tenga el Gobierno con cada uno de ellos en las reuniones salariales que fijarán los aumentos para este año.
Pero antes de sentarse a hablar sobre los sueldos, primero están las marchas, los reclamos y los paros que anticipan la dureza de las negociaciones que vendrán en los próximos días. Es que lo pretendido por cada uno de los gremios es que el aumento ronde el 45 por ciento.
Es por eso que, dentro del mismo plan, el sábado harán una marcha durante el Carrusel de Vendimia y el miércoles que viene se reunirán en un nuevo plenario para definir nuevas huelgas en el caso de que no se llegue a lo pretendido.
Es que el 25 por ciento ofrecido hasta ahora a los docentes es la referencia que todos los sectores públicos miran como la que les harán también a ellos. De allí que salgan a anticiparse y manifiesten que no sólo no aceptarán esa suba (aunque no se les haya ofrecido aún) sino que ya tienen "un plan de lucha".
"Pedimos un 45 por ciento de aumento en concepto de recomposición salarial y poder abrir las paritarias de nuevo en seis meses", exigió Raquel Blas, secretaria general de ATE. El pedido puntual es lo más contundente del reclamo y es lo que cruza a todos los gremios y sectores que se han enfilado detrás del mismo "plan de lucha".
Así quedó delineado el jueves pasado cuando en un plenario, similar al que quieren realizar el miércoles 12, decidieron comenzar a "a combatir con los gremios estatales unificados" ya que consideran que "firmar un 25 por ciento es aceptar una medida de ajuste", según defienden.
Es por eso que anticipan que la pelea salarial "no va a ser fácil" y en función de esto planifican. Además de la contramarcha del Carrusel el sábado (a las 8 desde la plaza Italia), para el miércoles 12 anuncian que volverán a juntarse todos los sectores estatales en la puerta de la Legislatura en donde vamos a evaluar lo que haya surgido de las paritarias y vamos a definir un plan de lucha", agendó la referente de ATE.
Paritarias en la mira
El tiempo de aquí hasta el próximo miércoles en el que se puedan definir nuevos paros está atravesado por reuniones salariales clave. Hoy está el primer encuentro de los Judiciales con el Gobierno, al igual que la postergada paritaria con el SUTE. El 10 se vuelve a reunir el Ejecutivo con la Salud, cuando los médicos esperan una respuesta a lo que ya vienen señalando.
"En ningún momento el Gobierno nos ha hecho un ofrecimiento. Hasta ahora se han limitado a traernos los oídos, pero no una propuesta", reclamó Isabel del Pópolo, secretaria General de Ampros, y apuntó: "Pedimos un aumento de un 45 por ciento porque hay tres impuestos que son regresivos: la inflación, la devaluación y el impuesto a las Ganancias".
Lo conseguido en las distintas mesas de discusión se pondrá en consideración en el próximo plenario y de allí surgirán posibles manifestaciones o no.
La medida de fuerza de ayer no incluyó movilización, sino que se trató de un paro sin asistencia a los lugares de trabajo, algo que de por sí afecto algunos servicios. En donde más se sintió fue en los hospitales, sobre todo aquellos del Gran Mendoza, en donde a pesar de que se brindaron los servicios esenciales y las guardias establecidas, la gente también prefirió no ir.
"No hubo movimiento durante la mañana. Al parecer, todos sabían que hoy (por ayer) la atención se iba a resentir", dijeron desde el Hospital Central, uno de los más disminuidos en la atención.
En los Tribunales la situación fue distinta y hubo movimiento. "Acá han venido a hacer trámites y se los ha atendido", dijeron desde el Poder Judicial. "El acatamiento fue cercano al 80, 85 por ciento en todas las jurisdicciones", evaluó Carlos Ordóñez, secretario general de Judiciales.
En la Administración Central, el nivel de adhesión rondó entre el 50 y el 60 por ciento, mientras que en la Administración Tributaria Mendoza (ATM) informaron que se atendió con normalidad.
