Después de que en la Justicia local se recibieran más de 100 denuncias que tienen en la mira a una comunidad de gitanos que estafan con la compra- venta de autos, la policía detuvo al primer sospechoso.
La captura se produjo el viernes pasado, cuando el fiscal Gonzalo Marzal ordenó un allanamiento en el marco de las investigaciones que se realizan desde hace poco más de un mes tanto en su fiscalía como en la que lidera su par, Juan Ticheli.
El procedimiento para dar con el sospechosos se hizo en una casa de Rodeo de la Cruz, Guaymallén, donde viven los gitanos complicados por los denunciantes.
Según las presentaciones que hay en la Justicia local, los estafadores son más de 10 y siempre montaban el mismo "modus operandi": después de conseguir un comprador de uno de los tantos vehículos que ponen "a la venta", hacían una reunión durante la cual se quedaban con el dinero.
En ese acto aparecían gestores que supuestamente se encargarían de que realizar los trámites correspondientes ante la AFIP. Pero mientras los compradores esperaban recibir el vehículo, las cosas se complicaban: el gestor no aparecía, el dinero tampoco y las víctimas debían abandonar la vivienda sin el rodado y sin plata.
Víctimas federales
La mayoría de los damnificados son de distintas provincias del país ya que en "Mendoza se han avivado", dicen allegados a la causa. En cambio "los foráneos no están al tanto de las tramoyas y caen". Las denuncias van desde Tierra del Fuego hasta Salta. "Solo falta alguien de Jujuy y nos volvemos completamente federales", bromea una de las víctimas. Se estima que el dinero con el que supuestamente se han quedado los gitanos supera ampliamente los dos millones de pesos.
Querellantes
Después de haber permanecido en una "meseta" durante mucho tiempo, los expedientes comenzaron a moverse en los últimos meses. En parte porque las víctimas crearon el GEM -Grupo de estafados en Mendoza- y, cada uno a su tiempo, fue regresando a la provincia para exponer la situación ante la Justicia y ofrecer las pruebas que tenían.
Por el momento, hay dos personas que se han constituidos querellantes y que son patrocinados por el abogado Pablo Cazaban. Pero el profesional recibe todos los días más de cinco llamadas de damnificados que quieren su patrocinio. "Una de las claves es que los denunciantes se ordenen para poder llevar al día cada uno de los casos", explica.
El sujeto detenido está imputado por varias estafas y fue reconocido durante una rueda, lo que complica su situación judicial.
Igualmente, hay una buena cantidad de prófugos y muchas pruebas en su contra.