Un video publicado hoy en internet dijo mostrar a miembros del grupo extremista Estado Islámico amenazando con matar a dos rehenes japoneses a menos que reciban un rescate de 200 millones de dólares en las próximas 72 horas.
La grabación, identificada como realizada por al-Furqan, la división de medios de la milicia, y publicada en sitios web vinculados al grupo imitó otras amenazas a rehenes realizadas por el grupo.
El insurgente que aparece en ella también se dirige directamente al primer ministro japonés, Shinzo Abe, ahora en una visita de seis días a Oriente Medio con más de 100 funcionarios del gobierno y presidentes de empresas niponas.
En una comparecencia en Jerusalén, Abe prometió rescatar a los rehenes, identificados por los extremistas como Kenji Goto Jogo y Haruna Yukawa. El mandatario exigió a la milicia la inmediata liberación de sus compatriotas.
"Sus vidas son prioritarias'', dijo Abe añadiendo que "extremismo e islam son cosas completamente diferentes''.
El video muestra a los dos hombres vestidos con trajes de color naranja como ya ocurrió con otros rehenes asesinados por el grupo Estado Islámico, que controla un tercio del territorio de Irak y Siria.
"Para el primer ministro de Japón: Aunque está a más de 8.500 kilómetros (5.280 millas) de Estado Islámico, se ha ofrecido voluntario para participar en esta cruzada'', dice el insurgente, que aparece blandiendo un cuchillo y se parece y suena como el británico implicado en otras decapitaciones ejecutadas y filmadas por el grupo. "Ha donado con orgullo 100 millones de dólares para matar a nuestras mujeres y niños, para destrozar las casas de los musulmanes''.
El departamento antiterrorista del Ministerio de Exteriores de Japón ha visto la grabación y analistas están evaluándola, dijo un funcionario que habló bajo condición de anonimato por las normas de la oficina.
Hablando en Tokio, el secretario del gabinete, Yoshihide Suga, decline comentar si Japón pagaría el rescate.
"Si es cierto, el acto de amenazar a cambio de la vida de una persona es imperdonable y sentimos una fuerte indignación'', dijo Suga a periodistas. "Haremos nuestros mayores esfuerzos para lograr su liberación lo antes posible''.
En agosto, un ciudadano japonés que se cree que es Yukawa -un operador de una empresa militar privada de unos 40 años-, fue secuestrado en Siria tras viajar al país para entrenar con insurgentes, según una publicación en un blog. Fotografías en su perfil de Facebook lo muestran en Irak y Siria en julio. En un video en su página aparece sosteniendo un rifle de asalto Kalashnikov con el texto: "Guerra siria en Alepo 2014''.
"No puedo identificar el destino. Pero el próximo podría ser el más peligroso'', escribió Yukawa en su última entrada en el blog. ``Espero filmar mis escenas de lucha durante la próxima visita''.
El padre de Yukawa, Shoichi, que vive en Chiba, a las afueras de Tokio, expresó su consternación por la noticia en una entrevista con la televisión pública japonesa NKH. "No entiendo esto'', dijo. "Estoy muy confundido''.
Goto es un reputado periodista independiente japonés que fue a Siria el año pasado para cubrir la guerra civil y conocía a Yukawa.
"Estoy en Siria para informar'', escribió en un correo electrónico a un periodista de la Associated Press en octubre. ``Espero que poder transmitir la atmosfera de donde estoy y compartirla''.
El grupo Estado Islámico ha decapitado y tiroteado a cientos de cautivos -principalmente soldados iraquíes y sirios- durante su avance por los dos países, y ha celebrado sus asesinatos masivos en videos extremadamente explícitos.
Un yihadi con acento británico aparece también en las grabaciones de las decapitaciones de los rehenes estadounidenses James Foley y Steven Sotloff, y de los británicos David Haines y Alan Henning.
El grupo tiene también retenido al fotoperiodista británico John Cantlie, que ha aparecido en otros videos de propaganda extremista, y a una mujer estadounidense de 26 años capturada el año pasado en Siria mientras trabajaba con grupos de ayuda. Funcionarios estadounidenses pidieron que no se identifique a la mujer por temores por su seguridad.
La grabación del martes es la primera en que el grupo Estado Islámico pide específicamente dinero por los rehenes. Aunque el insurgente del video lo vincula a la ayuda ofrecida por Japón para luchar contra la milicia, llega en medio de pérdidas recientes de los extremistas por los ataques aéreos de la coalición liderada por Estados Unidos contra sus objetivos. Además, la milicia liberó recientemente a unos 200 rehenes yazidíes, en su mayoría ancianos, avivando las especulaciones de responsables iraquíes sobre que el grupo no podía hacerse cargo de ellos.