Con bombos y platillos en julio de 2013 fue sancionada en la provincia la famosa Ley de Talles N° 8579, que prometía terminar con la peregrinación para conseguir ropa de muchos mendocinos que no se ajustan a las medidas "estándar" del mercado.
Sin embargo, la norma nunca se reglamentó y desde el gobierno provincial la consideraron inaplicable. Es que la mayor parte de las fábricas de indumentaria están localizadas fuera de Mendoza por lo que la responsabilidad por cumplir la reglamentación recaía casi exclusivamente en los comerciantes.
Ahora aparece una nueva luz de esperanza para aquellos que todavía esperan que se resuelva la problemática. Es que la Cámara de Diputados de la Nación le dio el miércoles media sanción al proyecto de ley que establece la creación del Sistema Único Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria (Suniti), que regirá en todo el país. Su objetivo es garantizar que todas las personas encuentren la ropa de su tamaño y en todas las marcas y a la vez combatir la discriminación y enfermedades tales como bulimia y anorexia.
Desde la dirección de Fiscalización y Control - dependiente del Ministerio de Economía Infraestructura y Energía- celebraron la iniciativa, ya que desde hace tiempo consideran que la solución al problema de talles debe darse por una ley nacional. "Que tenga media sanción es un logro, de todas maneras hay que esperar a ver cómo sale", dijo con cautela Mercedes Zuloaga, titular de la dirección. Asimismo remarcó que una vez aprobada debería reglamentarse y luego lograr la adhesión de la provincia. "Es todo un proceso, pero sería la forma de que se cumpla lo que alguna vez se buscó", remarcó.
Además recordó que el texto de la ley establecía que los comerciantes debían medir cada una de las prendas para ver si se adecuaban a las medidas reales establecidas en una tabla y si no lo hacían colocarles un sello de agua con el talle corregido. "Era irrisorio, ya que el producto tiene que salir con su correspondiente etiqueta de fábrica", manifestó la funcionaria.
Si bien la dirección que preside Zuloaga no reciben denuncias, es consciente que es un reclamo frecuente que los mendocinos no encuentren talles grandes, ni muy chicos, ni largos. "Pero también tenemos reclamos de los mismos negocios que nos dicen que no compran talles más grandes porque no les venden las fábricas. Y que de hacerlo, como son por encargo les cobran más caro", explicó. Asimismo la funcionaria reconoció que sobre todo la ropa más moderna pero económica para chicas jóvenes suele comercializarse en talle único.
Lenta concientización
Si bien son todavía muchas las personas que tienen problemas para encontrar la indumentaria adecuada para vestirse por problemas de medidas, muchos comercios tratan de adecuarse y revertir la situación. En un recorrido por el centro mendocino realizado por este diario, desde diferentes negocios aseguraron ofrecer talles grandes, aunque muchos reconocieron que no disponen de tanta cantidad, ni tienen mucha variedad de modelos. También pudieron observarse carteles que remarcan la disponibilidad de todos los talles y maniquíes que no son tan esbeltos como los tradicionales.
"Nosotros tenemos talles del 0 al 56 porque tenemos distintos tipos de clientas", relató Natalia desde Etam. De todas formas reconocieron que no tienen tanta variedad de modelos. "Permanentemente estamos pidiendo que manden más modelos", contó. Además relató que muchas clientas que eligen ese local, les comentan de la dificultad de encontrar diversidad de tamaños.
En tanto Liz, de modas Cintia, comentó que tienen remeras hasta talle 8 cuando antes sólo llegaban hasta el talle 6.
"Es la ropa que primero se vende", señaló. Igualmente, reconoció que tienen otro tipo de musculosas que son talle único. "Hay algunas clientas que se han enojado por eso", recordó.
Desde una casa de pantalones con fábrica en Mendoza también aseguraron contar con variedad de talles tanto para hombres como para mujeres. "La verdad es que nos piden mucho", deslizaron desde allí. Además comentaron que a veces les cuesta conseguir cortes de telas para fabricar ese tipo de talles más grandes.
Tratando de conseguir ropa de media estación, Melina Romero (28) se encontró ayer con algunas dificultades. "Para mí es una tortura venir al centro, pero se me vino el frío y no puedo usar siempre lo mismo", contó. Si bien le ofrecen algunas prendas en sus medidas, no suelen ser de su gusto. "Lo más difícil es encontrar ropa moderna y casi siempre termino bajando las expectativas y llevando algo para una señora más grande", se lamentó.
Distinta es la problemática de Luciana Pérez, a quien lo que la complica es su delgadez y altura. "Todos los pantalones son cortos porque termino comprando en la sección de niños", contó entre risas. Ella en muchos casos opta por agregarle tela y hasta por hacerse pantalones a medida.
¿Qué dice la ley?
Según la media sanción del Senado, para establecer este sistema único para todo el país, el Poder Ejecutivo Nacional realizará en todo el territorio y cada 10 años "un estudio antropométrico de la población".
Señala que todo comerciante, fabricante o importador de indumentaria debe identificar cada prenda de acuerdo con el sistema único normalizado de identificación de talles aprobado por la autoridad de aplicación", dice en su artículo 6° y en el 7° determina que la etiqueta con su correspondiente pictograma deberá estar indicada en forma detallada.