Que empiezan, que no. La falta de acuerdo entre el Gobierno y el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) hace peligrar el inicio de clases previsto para el próximo lunes, 25 de febrero.
Sin embargo, esta falta de definición no ha alterado la rutina de los padres que, como ya es costumbre durante los últimos días de febrero, de a poco van colmando los comercios del rubro escolar y haciendo números para el primer gran desembolso del año.
En el centro mendocino aún no se registran picos de ventas ni la gente ha invadido masivamente los locales, pero esperan que entre viernes y sábado el movimiento sea mucho más intenso.
"Siendo hoy feriado (por ayer) no hemos tenido más ventas ni consultas de las que tenemos un día hábil. Incluso han sido menos. Pero seguramente el viernes y sábado vamos a tener picos y más movimiento", indicó Germán, encargado de Casa Segal.
"Estoy comprando las cosas básicas, como para que mis hijas pueda empezar las clases con lo justo y necesario. El mes que viene compraré las cosas que faltan", destacó por su parte María Inés González, una de las mendocinas que aprovechó el feriado de ayer para adelantar algunas compras.
Poco movimiento
Al igual que ocurrió durante los feriados de carnaval (11 y 12 de febrero), muchos de los encargados de los comercios de artículos escolares vieron la oportunidad de abrir sus puertas con la idea de que los niños y sus padres se acercarían para hacer las compras. Sin embargo, ayer el panorama no fue el planificado.
"No notamos que la gente haya aprovechado el feriado. Por lo general el movimiento se intensifica durante la semana previa al inicio de clases. Pero ya estamos a miércoles y no es tan masivo. Creo que es porque la gente no termina de asimilar que se adelantan las clases y vienen los últimos días. O compra después de la Vendimia, una vez que ya empezaron las clases", contó por su parte Diego, uno de los encargados de la librería Rayuela ubicada en calle Garibaldi.
En el lugar, pese a no haberse vivido aún la "fiebre de compras", destacan que el movimiento no varía mucho del que tenían el año pasado a esta altura y cuando el comienzo del ciclo lectivo estaba a la vuelta de la esquina.
Por su parte, Miriam -encargada de la casa de uniformes Tesis (calle San Martín)- coincidió con sus pares de Rayuela y Segal al destacar que no hubo más gente en el local durante el día de ayer.
"Igual hay mucho movimiento. La gente se está anticipando para hacer las compras, comiencen las clases o no el lunes. Por ahí con los artículos de librería es distinto porque pueden esperar unas semanas, pero con los uniformes tienen que tener todo listo para el inicio de clases. Incluso están los que han comprado o reservado antes de las vacaciones", contó la vendedora en el interior del local donde justamente habían pegado un cartel en la vidriera anunciando que abrirían sus puertas a pesar del feriado.
En este comercio también aguardan que haya un boom de ventas y consultas durante el fin de semana, incluyendo el domingo. "La gente está aprovechando mucho las compras con tarjeta de crédito y las promociones. Hay un poco más de flujo que el año pasado", agregó.
En calle Godoy Cruz, Segal es uno de esos lugares que año tras año no da abasto cuando se acerca el comienzo de clases. Y si bien ayer la cantidad de gente era significativa en los pasillos, también esperan que el fuerte de las ventas lleguen el fin de semana.
"No ha sido una buena idea abrir los feriados. En los de carnaval vino 50% de la gente que viene en un día normal y a la tarde tuvimos que cerrar. Y hoy (por ayer) hasta las 10:30 no había mucha gente. La verdad que no ha habido más movimiento que otros días, no hace la diferencia", destacó el encargado del local ubicado en calle Godoy Cruz.
Más allá de esta situación, el comerciante indicó que la gente ya está haciendo compras y que, de a poco, va sacándose esa tarea pendiente. "La mayoría espera a última hora, al último día y por eso es un hecho que el sábado va a estar lleno. Lo que pasa es que muchos vienen de vacaciones, con gastos altos y esperan a que pase el fin de mes y se ?limpien' sus tarjetas de crédito. Los primeros días de marzo la gente viene y compra el restante de cosas", sentenció.
Adelantados y previsores
Más allá de que para los comerciantes fue como un día más, cientos de padres pudieron usar el último feriado de las vacaciones para empezar a tachar artículos en la lista escolar.
Tal fue el caso de Juan Carlos (37), quien llevó a sus dos hijos para que vean y elijan sus carpetas y mochilas.
"Trabajo todos los días en horario partido y si no venía hoy iba a tener que esperar hasta el fin de semana. Y el sábado esto va a ser un caos, así que aprovecho y voy comprando cosas ahora. Igual ya tengo asumido que voy a tener que volver el sábado y ni quiero pensar en eso", contó el hombre con un dejo de resignación.
En la misma situación se encontraba Roberto Álvarez, quien hizo un tour por librerías de todo el centro mendocino acompañado de su familia. "Es imposible comprar ahora todo lo que piden en la lista. La mayoría de los artículos los vamos a comprar en marzo. Pero no podemos mandar a los chicos sin nada a clases", confesó el godoicruceño.
También están los que, previsores, recorren, preguntan y toman nota de todo antes de desembolsar.
"No sé qué va a pasar con el inicio de clases, porque es una locura que estemos a menos de una semana y no se pongan de acuerdo. Igual estoy un poco seco de plata. Estoy averiguando precios y en base a lo que convenga, la semana que viene vengo a comprar. Tengo tres hijos, no es simple hacer las compras para todos de un solo tirón", argumentó Micaela Villegas en la puerta de casa Segal.
