Dalma y Gianinna se expresaron con emotivos mensaje a través de sus redes sociales. El juicio se extenderá hasta julio. Declararán 192 testigos.
Cuatro años y dos meses después de la muerte de Diego Armando Maradona, se dió inicio al juicio por su fallecimiento en los tribunales de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires. Las hijas del ex jugador, Gianinna y Dalma Maradona, se pronunciaron al respecto: “Llegó el día. Este partido no lo vas a jugar solo”.
Maradona murió el 25 de noviembre de 2020, a los 60 años. El hecho tuvo lugar en una casa del barrio privado San Andrés, en Tigre. Según la autopsia, la causa fue un edema agudo de pulmón y una insuficiencia cardíaca, pero los fiscales fueron tajantes en el expediente: “Murió en una situación de desamparo” y “librado a su suerte”. Ahora, el proceso que busca esclarecer responsabilidades comienza a desplegarse.
Desde la madrugada, las voces de sus hijas, Dalma y Gianinna Maradona, marcaron el tono del juicio con mensajes que resonaron entre los seguidores de su padre. Gianinna publicó una foto con la frase que se convirtió en bandera desde su muerte: “Justicia por Diego”. En la cuenta de Instagram que ambas administran, el reclamo se replicó con una imagen negra, austera y cargada de gravedad.
La causa tiene nombres y apellidos. Siete personas enfrentarán el banquillo de los acusados: la psiquiatra Agustina Cosachov, el neurocirujano Leopoldo Luque, el psicólogo Carlos Ángel Díaz, la médica clínica Nancy Edith Forlini, el enfermero Ricardo Almirón, el jefe de enfermeros Mariano Ariel Perroni y el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna. Una octava acusada, la enfermera Dahiana Madrid, será juzgada más adelante en un proceso paralelo. Todos están imputados por homicidio simple con dolo eventual, un delito que contempla penas de entre 8 y 25 años de prisión.
Dalma habló en LAM (América) y dejó frases contundentes: “La Justicia tendría que fallar a su favor (de Diego). Había personas que tenían que hacer su trabajo y no sé por qué no lo hicieron”, sostuvo. Luego fue más allá: “Queremos que estas personas digan quién los contrataba, quién les pagaba los sueldos, quién manejaba la casa”. La sospecha de un entorno poderoso, que según ella protegía a los médicos y enfermeros, sobrevuela el proceso. “Ellos tienen mucha plata, que nosotros no tenemos. Yo, para defender a mi papá y para que tenga justicia, voy a ir hasta lo último”, sentenció.
Las primeras jornadas estarán dedicadas a la lectura de la acusación fiscal y los alegatos de apertura de las defensas. Sin embargo, se acercan los testimonios. Se espera la declaración de 192 testigos, entre ellos, la exesposa de Maradona, Claudia Villafañe; amigos cercanos como Verónica Ojeda, y sus propios hijos, que deberán sentarse frente a los jueces y revivir las últimas semanas del ídolo.