Margot Robbie es una de las estrellas de “Babylon”, la nueva película de Damien Chazelle. Nos traslada a la Hollywood de los años 20 para seguir el ascenso y caída de diversos personajes a lo largo de su frenética vida, justo en medio de la transición del cine mudo al sonoro. Entre los problemas de cada personaje están los consumos de drogas y estupefacientes.
Acompañando a Margot Robbie, hay actores de la talla de Brad Pitt, Tobey Maguire y Li Jun Li, entre otros, así como el mexicano Diego Calva, quien ya fue nominado al Globo de Oro por su destacado trabajo. Estos seres en la ficción son quienes se dejan arrastrar por los excesos, el alcohol y las drogas.
Esta producción pone otra vez en duda cómo es que los actores logran llevar a cabo estas escenas de puro desenfreno y qué es lo que no paran de esnifar, entendiendo que si llegará a ser la verdadera sustancia, obviamente les traería problemas de salud (además de legales por obvias prohibiciones).
En una entrevista para BuzzFeed Australia, Margot Robbie ha respondido a estas cuestiones. La actriz explicó que, cuando vemos cocaína en una película, “normalmente se trata de vitamina B en polvo”, aunque, en caso de que no se esté ingiriendo, suele ser “azúcar glasé o laxante para bebés en polvo”.
Cuando el medio australiano le preguntó si duele esnifar estas sustancias en repetidas ocasiones durante el rodaje, la actriz de éxitos como “Escuadrón Suicida” o “El lobo de Wall Street” respondió contundente: “Sí, no es agradable”.
Asimismo, Margot ha desvelado que también sufrió durante el rodaje de “Babylon” debido a la adicción al tabaco de su personaje. Nunca en su vida ha tocado un cigarrillo por lo que tuvo que “fumar cigarrillos falsos sin parar” para conseguir la voz ronca de su personaje: “En el set, hay cigarrillos que no tienen nicotina. Son cigarrillos de hierbas, pero son terribles y saben fatal”.