En los últimos años, Agustina Gandolfo y Lautaro Martínez vivieron de todo. El delantero de la Selección fue campeón del mundo en Qatar 2022, se casaron en junio de 2023 en una megafiesta y dos meses después tuvieron a su segundo hijo.
El alto perfil que tienen por el estrellato de Lautaro en el futbol y en el combinado argentino transformó a Agustina Gandolfo en una influencer con más de un millón y medio de seguidores en Instagram.
Su vida dio un giro tan tremendo como inesperado el día que conoció al Toro Martínez. Antes, tenía una rutina y un look muy diferentes, como se ve ahora en sus redes sociales.
El flechazo fue casi inmediato, y la entonces estudiante de Economía se animó a dejar todo para seguir a su corazón. Hasta allí, Agustina Gandolfo disfrutaba de la vida en familia en Mendoza y tenía dos locales de ropa hasta que un viaje con amigas a Buenos Aires lo cambió todo.
“Nos conocimos en Buenos Aires, justo antes de que él se viniera para Italia”, comentó Agustina hace varios años. El Toro, entonces figura de Racing, estaba por ser vendido al Inter, su actual club.
“Yo había viajado con unas amigas y nos vimos en un cumpleaños, no sabía quién era él. Nos cruzamos números de teléfono. Él me dijo ‘algún día te vas a ir a dónde yo me estoy yendo ahora’... Yo estaba negada completamente”.
Mientras el delantero se instalaba en Italia, siguieron hablando durante un tiempo, pero ella “ya lo sentía como novio”. Antes de viajar a conocerlo, se volvió a Mendoza para dar un par de exámenes de tercer año de su carrera y recién ahí aceptó la invitación del padre de sus hijos.
“Pasamos nueve días juntos y al día anterior a mi regreso me dijo ‘no te vas’. ‘¿Cómo no me voy? Tengo mis locales, mis estudios, mi trabajo’, le dije. Él llamó a mis papás, y les dijo que me iba a quedar unos días más. Y me quedé un mes más”, agregó.
La vida de Agustina Gandolfo cambió para siempre
Hoy, Agustina Gandolfo es reconocida no solo por ser la esposa del delantero de la Scaloneta, si no por su rol de emprendedora de diversos negocios: es dueña del restaurante italiano Coraje en Milán, ciudad donde vive.
Antes dejó la carrera de Economía porque en Italia no le reconocían ni una sola materia. Luego, compró junto a Lautaro Martínez un viñedo en Mendoza para cumplir otro sueño: crear su propia marca de vinos.