“Soy un gran manipulador”: Martín Bossi se despide de su increíble show Bossi Live Comedy en el Teatro Mendoza

Martín Bossi llega al Teatro Mendoza con su exitoso espectáculo “Bossi Live Comedy” con el que hizo giras por Estados Unidos y Europa, para despedirse tras dos años y más de doscientos mil espectadores. Hay tres funciones y se agregó una más.

“Soy un gran manipulador”: Martín Bossi se despide de su increíble show Bossi Live Comedy en el Teatro Mendoza
Martín Bossi llega con su increíble show de humor, imitaciones y música

Tras una exitosa temporada en el Teatro Metropolitan de la icónica Avenida Corrientes, Martín Bossi se prepara para conquistar al público local con cuatro presentaciones de “Bossi Live Comedy”, en Teatro Mendoza, el viernes 20, sábado 21 y domingo 22 a las 20:00, en tanto se sumó una nueva función el sábado 21, a las 22.15. Una combinación magistral de música, humor, danza y el innegable talento actoral de Martin Bossi logran emocionar y entretener al público. Las entradas, con valores que oscilan entre 25.500 pesos y 21.500 pesos, están a la venta en entradaweb.com o en la boletería del teatro.

El espectáculo “Bossi Live Comedy”, que debutó en marzo de 2023 en Argentina y arrasó en la última temporada de verano en Mar del Plata, traspasó los límites de Buenos Aires para presentarse en ciudades como Neuquén, Santa Rosa, Rosario, La Plata, San Juan, Mendoza y Córdoba, en una gira que no solo fue un éxito en suelo argentino, sino que también triunfó en escenarios internacionales, destacándose en Estados Unidos y Europa.

Martín Bossi es la cabeza de este espectáculo que tiene además, más de diez artistas en escena, junto a una gran orquesta en vivo y una destacada cantante internacional, ofreciendo una propuesta que combina humor, música y momentos conmovedores. La producción de “Bossi Live Comedy” está a cargo de un equipo de primer nivel, liderado por Ezequiel Corbo, Diego Djeredjian, Federico Hoppe, Luis Pena, Claudio Salomone y Román Vargas, quienes han sabido dar vida a un espectáculo que recibió elogios tanto de la crítica nacional como internacional.

Muy al estilo Bossi, su espectáculo no es simplemente humor, sino una experiencia mucho más profunda a través de la cual invita al público a explorar temas universales mediante un viaje emocional que explora temas universales como el amor y la nostalgia por lo perdido. Con su innegable talento para los monólogos, interpretaciones musicales y una energía incansable, Bossi contagia y genera en el público no solo explosiones de carcajadas y hasta el impulso de bailar arriba de las butacas. No es casual que este espectáculo haya ganado el prestigioso Premio Estrella de Mar en Mar del Plata, un galardón que destaca a los mejores shows del verano.

El show es una combinación magistral de stand-up, imitaciones, y música en vivo, donde Bossi despliega su versatilidad camaleónica. Durante dos horas, el comediante emociona al público con su repertorio de imitaciones de artistas como Elvis Presley, Luis Miguel y Joaquín Sabina, mientras intercala reflexiones sobre el amor y la nostalgia de tiempos pasados. El espectáculo también tiene un fuerte componente de interacción con el público, con momentos donde Bossi invita a los espectadores a cantar y bailar, creando una experiencia inolvidable.

Uno de los momentos más emotivos del show es el homenaje a Carlitos Balá, en el que Bossi pide al público un aplauso de pie para recordar al ícono infantil argentino. Además, la orquesta que lo acompaña está conformada por músicos de primer nivel, entre ellos el pianista Nelson Gesualdi y la cantante Judith Cabral, quienes añaden una capa de sofisticación musical a este espectáculo único.

En una charla con Los Andes, el showman habla no solo de su espectáculo, sino también de las preguntas incómodas, de lo que significa no ser tendencia en redes y de la importancia de la conexión persona a persona.

-¿Cuál es el estilo de tu espectáculo?

La estructura es una estructura muy simple, creo que la más antigua que ha habido en la historia de la Humanidad porque es volver al teatro catarsis, es casi como una iglesia de gospels donde hay nueve músicos volviendo a los ritmos más clásicos, como violines y vientos, hay una cantante que hace también comedia romántica y yo (es difícil hablar de uno) que hago un trabajo de showman donde fusionamos comedia, comicidad, stand up, limitaciones, canciones propias, tocar instrumentos todo puesto al servicio de un contenido muy fuerte un contenido fuerte.

-A veces el público, sobre todo si es más grande, cree que el show de stand up se burla o lo deja expuesto

Me parece un error, no comparto esa idea. Hay standupistas maravillosos que no necesitan tocar a la gente. Yo he visto en Nueva York hacer stand up en el estadio, ni se comunican con la gente y saben la gente llorando de risa. Yo no soy standapero, hago Stand Up y utilizo todos los recursos puestos en una es una una idea.

-¿Hasta dónde llegaste con este Music Hall?

Este show lo hicimos hasta Londres y no tiene nada que ver con las imitaciones ni las máscaras. Sí te puedo decir que es un show necesario en estos tiempos donde recojo el guante que nadie recoge, alguien tiene que hablar, alguien tiene que hacer denuncias, amorosamente, sobre algunas cuestiones del presente muy cuestionables. Y la idea es despedirme con una gira también por Latinoamérica así que es una experiencia muy linda la que vamos a llevar para todos aquellos que quieren seguir abriendo los ojos, aquellas personas que sospechan que algo está sucediendo y quieran recuperar valores, celebrar nuestra esencia, el romanticismo, cosas que se fueron perdiendo. Ahí los espero.

-Es un humor con una vuelta de tuerca que lo hace muy inteligente

La gente se ríe todo el tiempo, pero es una tragedia, las cosas que planteo son trágicas. Yo la verdad que tengo una cierta nostalgia de que ya me quedan dos meses de espectáculo, ya me despido.

-¿Por qué te despedis?

Porque lo hice durante dos años, lo vieron 200.000 personas y en tiempos de scrolleo la gente necesita todo el tiempo cambios y yo también necesito un poquito. Uno se puede expresar en miles de plataformas, y quiero que el showman descanse un poquito. Entonces tal vez el teatro desde otro lugar, con una comedia o ir a una plataforma y hacer una serie. Cambiar para después volver a mi actividad madre que es el showman.

Yo soy de la cultura del estudio, no de la repetición, donde gracias a Dios no tenía redes sociales y una gran ventaja porque no estaba distraído por este tipo de estímulos tontos. Si lo hubiera tenido tal vez no hubiera sido bueno.

-¿Nunca pensaste en formar a otros artistas?

La verdad, no a nivel docencia. Sí me gusta mucho pasar información. Tengo acá en frente a mi primo, que es como mi hijo, es el hijo de mi tía y trabaja hace 8 años conmigo. Me gustó pasarle data, mostrarle un camino, ver cómo una persona se forja una oportunidad de vida, eso me gusta. Hoy hablaba con un actor más joven que se dedica a imitar, y sentarme a aconsejarle y explicar algunas cosas. Estoy siendo menos egoísta. No sé tengo edad tampoco a los 49 años para enseñar. Tal vez algún día cuando no pueda subirme más a un escenario, dejarle a los alumnos lo que aprendiste, puede ser.

-¿Cómo sorteas las preguntas incómodas?

Yo soy un gran manipulador. Y sé que la palabra “manipulación” está mal vista, pero uno puede manipular para bien, en un teatro manipulo a la gente durante una hora para bien. Hay una una técnica para manipular y nosotros manipulamos todo el tiempo, de las redes nos bajan línea, o sea, todo es una gran manipulación en la vida. Durante mucho tiempo, mi profesión frente a los medios, (que son socios míos, este medio que me está haciendo una nota para Mendoza, ustedes tienen que ver con que yo haya comunicado mi existencia) es una concesión, un contrato sin firmar que hay entre los medios y los actores. Pero hay un punto en el que uno puede manipular y yo soy un profesional de hacerme el pelotudo.

- A eso quería llegar

Como no hay tanta capacidad para preguntar, porque la gente ya no escucha y hay una falta de cultura en línea generales, la clave es ir por el lugar de la claridad y no meterse en líos. La Verdad no tiene valor, estamos asistiendo a la muerte de la realidad, porque ya no sabe qué es verdad y qué es mentira y tampoco tiene mucha importancia. Si hay una mentira que sirve, se transforma en verdad.

-Pero igual sorteas preguntas difíciles

Yo voy preparado, tengo una contestación para cada problema: para la guerra de Ucrania, el aborto, Alberto Fernández, sexualidad, fitness, tenis, cine, para el penal que le dio a Argentina, yo tengo una respuesta conveniente. Después, la opinión de verdad, con mi gente íntima, pero voy adaptando y manipulando lo que más o menos se va necesitando, ahí yo me pongo bicho.

-¿Por qué te hacen tantas preguntas de sexo?

Porque son rendidoras, le respondes picante y al medio le sirve. Pero la verdad, no sé. En este caso vos estás haciendo una charla bastante original, pero generalmente son veinte preguntas que se repiten y yo tengo veinte respuestas. Soy un respondedor profesional.

-Hiciste televisión, ficción cine, recibiste premios de todo tipo ¿Qué es lo que te queda por hacer?

A nivel laboral, poder seguir haciendo lo mismo sin que se note mucho.

-Es una enorme modestia decir que lo tuyo no se nota mucho

Es que me refiero al tema de las tendencias: hay ciertos programas de streaming, cantantes, lugares y cosas. Por ejemplo, ir a ver la Selección Argentina es tendencia, sacarse fotos en la cancha con la familia, al margen de que está todo bien con ir a verla, pero hay una cuestión de tendencia. Vino Coldplay y mucha gente fue porque es tendencia, lo mismo con ciertos cantantes argentinos. Yo he logrado mi carrera fuera del ámbito de la información, o sea, no pertenezco a la telenovela del medio, soy un tipo que labura por el costado, lleno teatros, he hecho películas y siempre laburo bien pero sin participar del cuento del medio.

-Tu trabajo pasa por una autopista mucho más sólida que el camino de la tendencia, que es efímero

Te agradezco el piropo. Sí es una carrera sólida y creo que por eso sigo jugando después de 20 años. Tal vez haya gente que dure un ratito (hemos visto pasar muchas cosas) pero se puso tan heavy la cosa, hay tanta incultura, tanta estupidez, que poder seguir construyendo una carrera digna, que aparte es atemporal porque no parece de estos tiempos. Es muy difícil construir una carrera sana hoy sin prostituirse, quiero decir, arrodillarte ante una plataforma, tener que sacarte una foto con un jugador de la selección para vender entradas, sumar seguidores mostrando tu cuerpo, y las vacaciones, y que tu tía está embarazada… No depender de todo eso y poder seguir llenando teatros, eso es una bendición y lo que quiero seguir haciendo en este negocio.

-¿Te sentís más cómodo en las tablas o en la pantalla?

Vos que me preguntaste el tema del sexo, es cómo que te que te sentís más cómodo: acariciando alguien, abrazando a alguien, o por una videollamada. El amor es presencial. Es lindo ver cine, ver la tele, pero para desarrollar mi arte se necesita presencialidad.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA