Después de atravesar meses de frustración y enfrentar diversas situaciones desalentadoras, María Becerra tomó la decisión de expresar su malestar hacia una figura de la industria musical que intentaba perjudicar su carrera y obstaculizar su participación en numerosos festivales.
La talentosa artista argentina, conocida como La Nena de Argentina, encontró en el reggaetón clásico una vía para canalizar sus emociones y hacer frente a este abuso, dando vida a su nueva canción “Primer Aviso”.
En colaboración con la renombrada cantante Ivy Queen, María Becerra aborda los desafíos y las injusticias que enfrentan las mujeres en la industria musical a través de esta canción de ritmo contagioso.
La letra de “Primer Aviso” nació en un momento de gran enojo para la artista de Quilmes, cuando su productor musical, Xross, le recordó un ritmo musical que habían creado previamente.
El fuerte mensaje en la canción
Inicialmente concebida como un tema en solitario para expresar su descargo personal, María decidió involucrar a Ivy Queen después de compartir la canción con ella.
María explicó: “Iba a ser mi descargo pero cuando le mandé el tema a Ivy, para que ella coree mis barras e hiciera Ad Libs como todos los demás, me mandó directamente un verso porque se sintió identificada”.
Ivy Queen, quien se une a María en esta canción, compartió su perspectiva y experiencia personal: “El verdadero empoderamiento está en la acción no en un simple hashtag. Y en ‘Primer Aviso’ lo que quise fue tomar acción mediante la empatía de haber vivido lo que María Becerra menciona en su tema”.
La colaboración entre ambas artistas se tradujo en un videoclip impactante que refleja las diferentes realidades y experiencias de vida.
Filmado tanto en Estados Unidos como en Argentina, el video contó con la participación de María en el barrio porteño de Lugano, donde se sumaron bailarines y jóvenes de la zona para crear una atmósfera auténtica y representativa de los orígenes de la cantante.
El director del videoclip, Julián Levy, logró capturar la esencia de la canción al filmar en monoblocks similares a los que María conocía de su infancia, proporcionando una plataforma para que los talentosos bailarines locales mostraran su arte y se expresaran frente a las cámaras. En palabras de María, el objetivo era claro: “Darle visibilidad a nuestra gente”.