Llegó el día. Lali, con su luz y fuerza arrolladora hizo explotar al Teatro Griego Frank Romero Day ante 20 mil personas, en una noche perfecta en la que el calor dio tregua y un fresquito amoroso abrazó a los presentes.
Del mismo escenario en el que hace pocos días se coronó a la paceña Laura Verde como la nueva Reina Nacional de la Vendimia, emergió una diosa cuya luz y fuerza arrolladora cautivó a todos.
Desde temprano se podía ver a la gente copar el Frank Romero Day con alegría. Las nenas, con la emoción impresa en una sonrisa eterna llegaban con remeras, brillitos y carteles para ella, su ídola.
LA PREVIA
Previo al show, sobre el escenario se presentó el ensamble Musas 4, un grupo de artistas mendocinos y mendocinas dirigidos por Juan Pablo Moltisanti, integrado por Rubén Martínez (codirección), Zurab Tchrikishvili, Oscar Campos, Job Berón, Juan Manuel Ojeda, Lucas Luchetti, Franco Maza, Camilo Echave Cangemi, Flavio Vázquez, David Gologorsky y las increíbles voces de Lorena Miranda, Cynthia Lozada, Natalia Rossi, Lara Barreiro
La gente acompañó la propuesta con palmas y coreando los temas, todas versiones de reconocidos artistas latinoamericanos.
Luego de la presentación de Musas 4, los locutores de la segunda repetición de vendimia, Matías Valencia, Marianela Bomprezzi y la reina mandato cumplido, Mayra Tous, anunciaron una sorpresa. Se trataba de Robertito Funes Ugarte que hizo su debut sobre el escenario del Teatro Griego. El conductor arengó al público y evocó sus recuerdos de las vendimias desde los cerros y su Godoy Cruz añorado.
EL SHOW
A las 00:08 y después de que Dj Vico hiciera mover a todos, calmando a las fieras que gritaban por Lali, explotó todo. La artista irrumpió en el escenario con un look en total black y entonando “Eclipse”, tema coreado por todo el Frank Romero Day.
En las pantallas, los engranajes del Disciplina Tour coparon el escenario. La gente, a segundos de que empezara el show ya estaba extasiada. Grandes y chicos cantando a viva voz con ella, la diosa que tiene a todo el mundo hipnotizado.
El segundo tema que hace enloquecer a todos es “Asesina”. Sobre el escenario, Lali y sus bailarines, la rompen. Las pantallas
Después del segundo tema el silencio intenta apoderarse del teatro, pero si uno prestaba atención se podía escuchar los latidos del corazón de miles de almas en un solo palpitar.
“¿Cómo están?” preguntó Lali y abrumados por la cercanía de su estrella se escuchó un tímido bien. Volvió a preguntar y todo el público se hizo sentir.
“Ahora sí” lanzó la artista, quien en un brutal ataque de sinceridad dijo “son los restos de mí, pero vengo a dar todo”.
Después de “Tu novia”, el tercer tema, un clip de Cher acaparó las pantallas mientras Lali aprovechaba para hacer el primer cambio de look de la noche.
La artista volvió al escenario con un vestido dorado y cantó “Diva”. Con un despliegue de sensualidad absoluta, Lali demostró que ella es todo eso y más.
“Histeria”, “Irresistible” y “Soy” sonaron en una especie de popurri pop explosivo que hizo bailar y cantar a las 20 mil almas del Teatro Griego.
Brillante, sexy y desafiante. Así pisaba Lali el escenario. “¿Cómo se ven cantando?” preguntó la artista y anunció que el tema que venía se cantaba con todo. Y así fue, con los celulares iluminando el cielo mendocino, “Ego” hizo vibrar al Frank Romero Day que se venía abajo con un coro que miles de personas que cantaban con el corazón en la mano.
Sin dudas, EL momento de la noche. Una postal que nadie va a olvidar. Es increíble pensar que esa mujer que hoy está dejando todo en nuestra tierra viene de romperla en el Estadio de Vélez.
A media hora de haber empezado el show llegó el tema más nuevo de la diva. Con cambio de look incluído, Lali cantó “Cómprame un brishito”. Con un traje plateado, no dejó parte del cuerpo por mover e hizo delirar a todos.
“Necesito energía Mendoza” pidió Lali a los presentes y en un grito ensordecedor, las tribunas del Teatro le dieron esa inyecciòn de amor y fuerza que la cantante necesitaba para encarar lo que quedaba del show.
Lo que venía era “Una Na” y una coreografìa que incluyó beso con uno de sus bailarines. El Chape Tour, más presente que nunca.
El “olé olé olé Lali” se hizo sentir y Lali abrazó a su público con un “gracias amigos”. Después intentó leer algunos carteles del público pero confesó que era una “señora muy chicata”.
Para el próximo tema, Lali pidió disculpas por no haber podido traer a Mau y Ricky a la vendimia y pidió que todos cantaran con ella el tema “Sin querer queriendo”. La gente obedeció y no abandonó a la artista que en cada movimiento desataba una ola de gritos.
Con “Caliente”, el escenario se vistió de rojo y practicamente prendió fuego todo. No para un segundo de moverse. No podés dejar de mirarla.
Los baches entre tema y tema parecían no molestar. Lejos del enojo que podría causar, la gente no se cansaba de corear el nombre de Lali.
Con el escenario nuevamente de rojo, acompañando el nuevo look de Lali, llegó el momento que todos estaban esperando, llegó “Disciplina” y de nuevo la sexualidad de la artista a pleno sobre el escenario. Fuego, extasis y un público que no para de gozar.
El siguiente tema fue “Motiveishon” y una nueva cachetada a los sentidos. Imposible permanecer quietos ante tantos estímulos. La gente, eufórica.
Y como un fuego que no puede parar, el siguiente tema fue “N5″, trma que una vez que terminó volvió a cantar, pero esta vez a capella con la compañía de la gente.
“¿Están para la última?” preguntó Lali y la respuesta era más que obvia. Quién iba a querer que esto termine. Nadie.
“Como tú” fue el tema elegido para esta especie de bis fingido. Esto no puede acabar acá. Y no, faltaba “Boomerang”.
Con papelitos al aire y el grito eufórico de las 20 mil almas del Frank Romero Day, Lali se despidió del escenario a la 1.23 de la mañana, al grito de “¡Qué fiestón vendimia! y acercándose los más que pudo a la gente.
El show no escapó a la polémica. Y es que desde la producción de Lali sólo permitían que los reporteros gráficos fotografiaran los primeros tres temas de la artista. Además, no permitían el ingreso de los fotógrafos al escenario del teatro griego. La decisión generó molestias entre algunos colegas.
EL REGALO DE LA SOLE PARA LALI
La Sole pasó por el Frank Romero una noche antes que Lali y le dejó un mensajito en el espejo de camarín. “Lali comprame un brishito” escribió Soledad con labial. El mensaje se mantuvo intacto hasta que la diva llegó al camarín.