En el vasto catálogo de Netflix, surge un nuevo thriller coreano titulado “El legado”, donde los protagonistas de “El tranvía” se reencuentran para sumergirse en otro intrigante suspenso.
La serie, escrita por Yeon Sang-ho y dirigida por Min Hong-nam, presenta una trama intensa que explora el misterio y el peligro, centrándose en la historia de Yoon Seo-ha (Kim Hyun-joo).
A diferencia de sus roles anteriores, Kim Hyun-joo encarna a una profesora universitaria, Yoon Seo-ha, cuya vida da un giro inesperado cuando hereda el cementerio de su familia tras la muerte de su tío paterno, Yoon Myung-gil (Kim Jae-gun).
Este suceso desencadena una serie de eventos que transformarán por completo la rutina de la protagonista.
El relato se inicia con Seo-ha, una profesora con aspiraciones académicas, quien sueña con alcanzar la posición de catedrática en la universidad donde trabaja.
Sin embargo, su mundo se desmorona cuando recibe pruebas de la infidelidad de su esposo. Este conflicto personal es solo el preludio de una pesadilla mucho más intensa.
La noticia del fallecimiento de su tío paterno la lleva a Jinseong-ri, un sector rural, para encabezar el funeral de un pariente que nunca conoció.
En este contexto, Seo-ha se encuentra con Kim Young-ho (Ryoo Kyung-soo), su medio hermano del cual no tenía conocimiento. La situación se complica aún más cuando Young-ho reclama públicamente el cementerio familiar, heredado por la profesora.
El legado, la nueva serie de Netflix
A medida que avanza la trama, la pesadilla de Seo-ha toma un giro inesperado con la muerte de su tío, envenenado con talio. Park Hee-soon, quien ya había compartido pantalla con Kim Hyun-joo en “El tranvía”, interpreta al detective de la policía Choi Sung-jun.
Este personaje comienza la investigación para desentrañar los misterios que rodean la muerte de Myung-gil.
El veneno se descubre en la botella de makgeolli, una bebida alcohólica tradicional, que el anciano consumía antes de morir, así como en las medicinas de su hogar.
Las sospechas se dirigen inicialmente hacia el alcalde y un constructor interesados en adquirir el terreno del camposanto.
Sin embargo, la trama toma un giro más oscuro con el asesinato violento del esposo de Seo-ha, quien es abatido con una escopeta. Las sospechas recaen en Young-ho, un personaje misterioso que además está familiarizado con ritos chamánicos.
