Lizzo es una cantante estadounidense de 35 años que fue demandada por tres de sus exbailarines, quienes la acusaron de “acoso sexual, crear un ambiente de trabajo hostil y vergüenza”.
Además, estas demandas contra Lizzo alegan que ella “presionó a uno de ellos para que tocara a un artista desnudo en un club de Ámsterdam”, expresa las noticias de la NBC.
Además, se supo que una bailarina al final “accedió” a tocar el seno de una artista desnuda por miedo a represalias, pese a que no tenía ningún tipo de interés en hacerlo.
También alega que la líder de baile de Lizzo, Shirlene Quigley, frecuentemente hacía comentarios sexuales y proselitismo de sus creencias cristianas contra el sexo prematrimonial.
A raíz de esto, Lizzo respondió públicamente este jueves a la denuncia publicando una larga declaración oficial en la que dice que las acusaciones representan un golpe inesperado.
El descargo de Lizzo tras las denuncias de acoso sexual
“Estos últimos días han sido desgarradoramente difíciles y abrumadoramente decepcionantes. Mi ética de trabajo, moral y respeto han sido cuestionados. Mi carácter ha sido criticado. Por lo general, elijo no responder a las acusaciones falsas, pero son tan incrédulas como suenan y demasiado escandalosas para no abordarlas”, comienza la declaración de Lizzo.
“Estas historias sensacionalistas provienen de ex empleados que ya admitieron públicamente que les dijeron que su comportamiento en la gira fue inapropiado y poco profesional. Como artista, siempre me ha apasionado lo que hago. Tomo mi música y mis actuaciones en serio porque, al final del día, solo quiero sacar el mejor arte que me represente a mí y a mis fans. Con la pasión viene el trabajo duro y los altos estándares. A veces, tengo que tomar decisiones difíciles, pero nunca es mi intención hacer que nadie se sienta incómodo o que no sea valorado como una parte importante del equipo”.