Lautaro Russo dejó a todos en shock con su acto de contorsionismo, pero la que quedó más impresionada fue La Joaqui, quien a la hora de la devolución hizo una íntima confesión: ”Si yo hubiese podido hacer eso, no habría sido cornuda nunca”. “Tengo tanto para decirte que no tengo cómo decírtelo. Es todo positivo”.
Y es que la presentación de Lautaro fue realmente sorprendente. Lookeado como una serpiente, el joven hizo cosas asombrosa con sus piernas, cruzándolas para todos lados y moviéndose como si careciera de huesos. Esto llevó a la Joaqui a pensar en cuan útil serían esas habilidades en cuestiones de pareja, y no tuvo filtro a la hora de expresarse.
El resto del jurado también quedó perplejo. Abel Pintos, por su parte, expresó: “Impresionante. Una cosa de locos todo. Tu talento y también tu intuición. Por momentos es como que vas midiendo lo que va pasando, y lo vas dosificando. Es impresionante”.
Flor Peña lo halagó de pies a cabeza, pero le dio un importante consejo: “Hoy estás tan despojado pero tan lleno. Te vi con tu piel y talento, y sin pirotecnia. Hubo un crecimiento enorme. Creo que entendiste cómo utilizar tu instrumento y viniste a hacer lo que tenías que hacer: mostrarnos quién sos. Creo que tenés que explotar tu sensualidad, que es interesante, es por ahí”.
Emir Abdul reconoció la cantidad de trabajo que puso el participante en su nueva presentación. “La primera vez vi a un chico soñador que mostraba lo que hacía, pero hoy vimos a un artista. Se notó que hiciste mucho laburo en cada cosa que planteaste hoy. Es para aplaudir”, indicó el bailarín.
La prolijidad y osadía del participante lo llevó a pasar de etapa, en un momento en el que es muy difícil para el jurado de Got Talent Argentina decidirse ante tanto talento y disciplina tan diversas. Las reglas del juego son esas, como explicó Flor Peña, pero, desde el punto de vista del público y de los propios participantes, a veces, no es justo.