Los Juegos Olímpicos son un maravilloso escenario para conocer a los deportistas más destacados de cada rincón del mundo y sus historias de vidas, pero también para el amor.
Miembros de la realeza, jefes de Estado, diplomáticos y muchas personalidades de linaje real han encontrado a su media naranja en algún Juego Olímpico.
Por nombrar algunos, se dice que don Juan Carlos y doña Sofía se conocieron en los Juegos Olímpicos de Roma, en 1960 y no en un crucero por el Mediterráneo como se cuenta cuando se habla de los abuelos de la Princesa Leonor, heredera al trono de España. No obstante, es solo un rumor.
Las tres parejas reales que se enamoraron en unos Juegos Olímpicos
En 1972, Carlos Gustavo y Silvia, los reyes de Suecia, se vieron por primera vez. En Munich se realizaban los XX Juegos Olímpicos y un sábado 26 de agosto – día de la inauguración de los JJOO-, una joven Silvia Sommerlath, asistente e intérprete, hacía de anfitriona en la sala VIP.
“Sentí la mirada de alguien sobre mí. Me di la vuelta. Un hombre me estaba observando con sus gemelos... ¡a sólo un metro de mí! Fue realmente inusual”, recordó años después hablando del entonces príncipe heredero de Suecia.
Muchos años después, este patrón amoroso se repitió para Federico y Mary de Dinamarca. Los Juegos Olímpicos, esta vez en Sidney, realizados en el año 2000 cambió la vida de Mary Donaldson, una abogada que trabaja en el mundo de la comunicación y la publicidad.
Al igual que ocurrió con los reyes de Suecia, Federico aún era heredero al trono, pero sin saberlo, la conexión fue inmediata y ella le dio su número sin esperanzas. “Me llamó al día siguiente. Algo había sucedido entre nosotros. Desde el primer momento en que empezamos a hablar, y ya nunca paramos”.
Los últimos tortolitos en conocerse y dar el sí quiero para la eternidad son Alberto y Charlène de Mónaco. Los príncipes de Mónaco se habían conocido en el año 2000 en el Campeonato Internacional de Natación de Mónaco (ella fue competidora), que presidía Alberto. Pero fue en los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín, en 2006, cuando se mostraron juntos por primera vez.