Mauro Icardi atraviesa uno de los momentos más complejos de su carrera profesional, en un contexto marcado por la escandalosa separación de Wanda Nara. El delantero argentino se sometió este lunes a una cirugía en Nordelta tras sufrir la rotura del ligamento cruzado anterior y los meniscos de su rodilla derecha.
Según él mismo contó a través de sus redes, la operación fue realizada con éxito y la figura del Galatasaray se someterá a un largo proceso de recuperación que lo mantendrá fuera de las canchas por varios meses.
El futbolista eligió compartir la noticia con sus seguidores a través de sus redes sociales. “Gracias Guille querido y gracias a todo el staff que trabajó en esta operación para que salga exitosa”, expresó Icardi, refiriéndose al equipo médico que lo intervino.
En el mismo mensaje, destacó el apoyo recibido desde su club en Turquía: “También quiero agradecer a mi gran familia @galatasaray por estar pendientes de cada detalle y organizar todo. Vuelvo pronto”.
El mensaje estuvo acompañado de imágenes desde su internación, donde se lo vio con semblante tranquilo, pero solo. Al jugador se lo vio internarse en soledad, ya que no trascendió quién lo acompañó en este difícil momento.
Mauro Icardi, furioso por las declaraciones de Wanda en lo de Susana
Mientras Icardi enfrenta este desafío físico, el contexto personal no deja de sumar tensiones. El escándalo mediático desatado tras las declaraciones de Wanda Nara en el programa de Susana Giménez sigue en el centro de la escena.
La mediática decidió hablar sin filtros sobre los motivos de su separación, desafiando un bozal legal que le había impuesto al futbolista. Estas revelaciones generaron una reacción inmediata por parte de Icardi, quien rompió el silencio con acusaciones contundentes a través de una charla difundida por el periodista Pepe Ochoa.
En el plano deportivo, la ausencia de Icardi representa un desafío para el Galatasaray, que deberá reorganizar su ofensiva mientras espera la vuelta de su delantero estrella. Según los especialistas, la rehabilitación tras este tipo de lesiones suele extenderse entre seis y nueve meses, dependiendo de la evolución.
