“Hace muchos años que quiero trabajar sobre mi mundo interno”. Quien dice eso es Carla Masignani, una bailarina mendocina que nos cuenta cómo surge la obra que estrenará la semana próxima. Si de mundos se trata, su experiencia sobra. Del mundo de la danza y la actuación y del mundo del arte callejero, pasó al mundo de la televisión, emocionó hasta las lágrimas a Abel Pintos y a miles de argentinos que la vieron en Got Talent, donde ella y su rueda Cyr llegaron a las finales del reality.
“A veces cuando digo ‘mi mundo interno’ siento que me quedo corta, porque es algo con que todos nos sentimos identificados”, asegura.
Got Talent
El paso de Carla por la pantalla no pasó desapercibido, llegó a las finales y conmovió al jurado. “La experiencia de la televisión fue muy potente. Es algo que me encantó, cero nervios a esas cámaras gigantes. Creo que porque a mí lo que más me ha fortalecido es hacer tanto arte callejero. La calle creo que es una cámara muchísimo más grande que la que hay en un estudio y a lo que me expongo ahí no tiene nombre. El otro era un placer. Venían, te maquillaban, me trataban bien. Entonces esa cámara era como una caricia al lado de lo que uno puede vivir en el arte callejero. Así que fue una experiencia que la disfruté mucho, la pude disfrutar sin nervios, con puro amor y con puro goce”, cuenta, con emoción.
Y, luego, agradece que esa exposición la ayude en su trabajo, a que la conozcan más. “A que el valor que yo me pongo el otro ya no me lo discuta” dice, como haciendo un reclamo. “No debería ser así y eso es algo que me cuestiono porque no soy distinta. Mi arte no es distinto, pero pareciera que la pantalla me ha dado más valor”, reflexiona.
Aún así, dice que esa experiencia la ayudó a confiar más en su arte: “Ver que artistas de esa envergadura realmente lo disfrutaron y se conmovieron y lo entendieron de la forma en que yo lo entiendo, para mí fue decir ‘vas bien, tranquila’, Me ayuda muchísimo a que las demás cosas que hago y quiero hacer también se vean”.
La obra
La idea la tiene hace muchos años. “Ni siquiera hacía rueda Cyr cuando se me me ocurrió” dice. “Quería plasmar una obra que hablara de la oscuridad y la claridad, y los colores y los matices. Y cuando tuve la idea tenía 20 años. Me faltaba transitar más cosas para poder plasmar algo más potente”, adelanta.
Carla cuenta que volvió a Mendoza a principios de este año y decidió llevarla adelante. La primera que convocó fue Érica Gómez, directora, dramaturga y actriz: “Me encanta el trabajo que hace. He ido a ver varias de sus obras y me gusta mucho las que ha direccionado y que me diga que sí me sorprendió porque no nos conocíamos”.
También convocó a las cantantes Melisa Budini y María Eugenia Moreno. “A Meli, hace varios años que me enamoré de su voz, en un momento en que entré en una milonga y estaba cantando. Siempre quise trabajar con ella. Euge, también siempre me pareció tan talentosa y encima son amigas y me parecía que esa fusión de amistad también iba a notarse en escena. Y se nota mucho esa complicidad que tienen”, relata.
Melisa Budini afirma que para ella es una gran alegría esta propuesta: “Carla me convoca a partir de las canciones que yo he escrito. Entonces para mí eso fue como una señal, porque tiene que ver con mi mensaje, yo despliego mi mundo interno en la composición, en la canción. Y cuando leí el guion, resoné absolutamente. Ese guion era como si realmente estuviera escuchando mi corazón, lo que me estaba pasando. Entonces fue imposible negarme a ese llamado”.
Eugenia Moreno se cruzaba con Carla en la calle y cuenta que “esa empatía se venía sintiendo y sentí que con Meli nos hemos animado a hacer cosas a dúo, así que me da mucha confianza este espacio. Caminando lo performático con otras agrupaciones, donde el teatro, la danza, el bodyart y la acrobacia se conjugan para decir algo desde el arte. Me pareció hermosa la propuesta de crecimiento, participar desde la música en estos ámbitos me parece enriquecedor, pero también siento que me permite y nos permite dejar esos mundos internos, esa voz propia, ese aporte”.
Érica, directora de la obra, recuerda que a Carla la conoce hace mucho, y que fue muy impactante verla en Got Talent. “A nivel televisivo logró transmitir tanta emoción a través de una pantalla y me parece que en vivo debe ser mucho más groso. Entonces para mí es un privilegio y un honor que se hayan puesto al servicio de esta mirada, de esta de esta intuición, lo que trato de hacer con los espectáculos que dirijo, que tienen que ver con los mundos femeninos casi todos”, afirma.
La rueda Cyr
“Cuando Carla me propuso hacer la obra yo le dije ‘bueno, pero la rueda va’. Entonces ella dijo ‘y estoy viendo. ¡No!’, le digo, ‘la rueda va’”, enfatiza la directora. Y explica: “A partir de ahí se empezó a incluir como parte del equipo. Se suma a un trabajo performático pero con un sentido en donde está todo ensamblado, música, actuación, danza y la rueda que pasa a ser un elemento protagónico.”
Para Melisa la rueda se expresa. “Yo me acuerdo de que una vez ella dijo: ‘yo no bailo sola, bailo con la rueda’. Y a mí eso me quedó y realmente lo veo. La rueda tiene vida, tiene movimiento propio y se expresa incluso con sonido”.
“La obra es una invitación a que se muevan cosas” —dice Érica— “porque la obra está tan llena de sugerencias y eso me gusta porque es más lo que te abre que lo que te dice, te abre mucho más a posibles sensaciones, a posibles interpretaciones”.
Las expectativas para Carla van por el crecimiento, por ser más profesional. “No me veo siendo otra cosa que no sea artista”, reconoce. “Entonces esto es como un ladrillo más para mi futuro. Quiero que siga y que crezca y creo que es un proyecto que, como el grupo lindo que somos, se puede sostener bastante tiempo”, concluye.
El equipo
Carla Masignani, actriz, bailarina. Protagonista y dramaturga de la obra
María Eugenia Moreno, música y docente. A cargo de flauta, percusión y actuación
Melisa Budini, cantante, compositora. A cargo de las voces, guitarra, composición de las canciones y actuación.
Érica Gómez, directora, dramaturga y actriz. A cargo de la dirección y asistiendo en la dramaturgia.
La obra se podrá ver todos los jueves de noviembre a las 21:30hs. El 7 y 21 de noviembre en La Nave Cultural. El 14 y 28 en el Espacio Cultural Julio Le Parc.