El actor argentino Claudio Rissi, reconocido por sus emblemáticas interpretaciones como villano en la televisión, falleció este viernes a los 67 años en el sanatorio Los Arcos de Palermo. Según informaciones, el actor estaba librando una batalla contra el cáncer.
La noticia fue compartida por la Asociación Argentina de Actores, que expresó su pesar a través de Twitter: “Despedimos con gran tristeza a nuestro afiliado, el actor Claudio Rissi. Durante su trayectoria de más de cuatro décadas se destacó en televisión, cine y teatro. Acompañamos a sus seres queridos en este duro momento”.
Rissi, cuya fama alcanzó su punto álgido gracias a su memorable papel como Mario Borges, el villano de la serie “El Marginal”, dejó una huella imborrable en la escena artística argentina con una carrera multifacética que abarcó diversos géneros tanto en teatro como en cine y televisión.
Nacido y criado en el barrio de Boedo, desde una edad temprana Claudio Rissi mostró su pasión por la actuación, la cual descubrió a los 10 años mientras participaba en actos escolares.
A los 18, comenzó a formarse en teatro en el Club River Plate, y más tarde continuó sus estudios en la Escuela Nacional de Arte Dramático.
La carrera de Claudio Rissi
Además de su destacado papel como Mario Borges en “El Marginal”, que lo catapultó a la fama en los últimos años, Rissi también dejó su huella en la televisión con personajes memorables como Galván en “Los simuladores”, El Fletero en “Okupas”, y el comisario Filpi en “El puntero”. Su aspecto imponente le valió la caracterización de personajes recios y sólidos.
En el ámbito teatral, la interpretación de Rissi como Tatita en “Terrenal (Pequeño misterio ácrata)”, obra de Mauricio Kartún basada en el mito de Caín y Abel, lo consagró como uno de los grandes actores argentinos, recibiendo importantes premios y elogios de la crítica especializada.
Además de su brillante carrera en la televisión y el teatro, Rissi incursionó en el cine con películas como “Erreway 4 caminos”, “Juan y Eva”, “La novia del desierto” y “La sombra del gallo”, dejando un legado artístico que será recordado por generaciones.