Siempre en diciembre empieza a formarse el panorama de lo mejor del año, y también de las producciones más exitosas. Se sabe: no las que fueron taquillazos (sea Marvel o algo por el estilo), sino aquellas que, por su calidad, pueden aspirar a llenarse las manos en la temporada de premios, que está a la vuelta de la esquina.
En este 2024, sin embargo, no ha habido ningún fenómeno masivo a la altura de lo que fue por ejemplo en 2023 el “Barbenheimer” (el día en el que “Barbie” y “Oppenheimer” estrenaron en simultáneo, congregando a multitudes a las salas en plan de ver las dos juntas). Lo más cercano a esto fue “La sustancia”, esa desmesurada cinta de body horror que desató un fenómeno entre la gente, con miles de memes incluidos.
Ha habido regresos, claro, como “Gladiador II” y “Alien: Romulus”, lo que confirma esa incuestionable tendencia de que el público prefiere seguir viendo historias conocidas (o al menos desprendidas de éstas, como “Wicked”), antes que nuevas. Aunque, para ser justos, sí hubo un puñado éstas: películas que tomaron riesgos narrativos como pocas veces se vio en la gran pantalla. “La sustancia” es una, pero también tenemos a “Emilia Pérez”, por ejemplo.
A continuación, un panorama de lo mejor que dejó este 2024.
1- Las retadoras: “Emilia Pérez” y “La sustancia”
La laxitud de géneros cinematográficos llega “Emilia Pérez” (de Jacques Audiard, en Netflix) a niveles pocas veces visto: drama, narcothriller, musical, comedia, por momentos lacrimógeno culebrón... Esta historia, de un narcotraficante devenido en mujer transgénero, es indescriptible y nos inocula la pregunta de “¿Qué acabamos de ver?”. Protagonizada por Karla Sofía Gascón (actriz trans española que está haciendo historia en las nominaciones de los Golden Globes y otros premios), Zoe Saldaña y Selena Gomez, “Emilia Pérez” es retadora para el espectador, pero eso no quita que esté llena de méritos: actuaciones que saben adoptar la versatilidad del guion, secuencias musicales de virtuoso despliegue, y sobre todo una dirección magistral que supo exprimir sus posibilidades, dándole unidad a algo que parecía imposible.
Con la anterior película, “La sustancia” (Coralie Fargeat, en MUBI) comparte lo excesivo y lo retador. La certeza de que este inverosímil guion, en otras manos, podría haber resultado en un verdadero desastre. Es la historia de Elisabeth Sparkle (Demi Moore), antigua gloria del cine que en el día en el que cumple 50 años es despedida de su programa de aerobic televisado. Desesperada, acepta probar un misterioso tratamiento que consiste en inyectarse un suero que hará nacer, desde sus propias entrañas, una versión más joven y bella de sí misma, Sue (Margaret Qualley). La delirante premisa se traduce en una película igualmente delirante, que va en un “in crescendo” lleno de escenas sangrientas, enredos y deformaciones. Uno puede terminar desconcertado viendo “La sustancia”, pero es una experiencia que hay que permitirse.
2- Las secuelas: “Gladiador 2″, “Alien: Romulus”, “Dune 2″
La primera en llegar a las salas fue “Dune 2″ (en Max), en febrero. La saga de Denis Villaneuve, basada en la homónima del escritor Frank Herbert, empieza a desplegar su potencial visual y narrativo en esta segunda entrega, tras el largo preámbulo sobre Arrakis que significó la primera. En estas casi tres horas, el héroe Paul Atreides (Timothée Chalamet) asciende en su rol de mesías, en un planeta sometido por la codicia de la especia. Villeneuve hace un esfuerzo enorme por presentarnos esta épica en toda su complejidad, vinculando aspectos religiosos e intrigas políticas. El elenco, que es enorme, también es rutilante: Zendaya, Rebecca Ferguson, Javier Bardem, Austin Butler, Dave Bautista, Josh Brolin, Florence Pugh, Christopher Walken, Léa Seydoux, Stellan Skarsgård, Charlotte Rampling y hasta la ascendente Anya Taylor-Joy en una aparición fugaz, que no hace más que “hypear” para la tercera parte.
Otro tanque secuela muy esperado fue “Gladiador 2″ (aún en algunos cines), que al igual que el clásico del 2000, fue dirigida por Ridley Scott. Esta vez, seguimos la historia de Lucius (Paul Mescal), tomado prisionero en Numidia y que, por su destreza en el combate, llega a convertirse en un vitoreado gladiador en el Coliseo. Sin embargo, el joven Lucius esconde secretos de linaje que se irán revelando en el filme y, sobre todo, deseos de venganza. Al igual que en “Napoleón”, Scott no escatimó en gastos para el suntuoso diseño de producción ni en licencias narrativas para conseguir mayor espectacularidad en algunas escenas, algo que le valió la crítica de historiadores. Sin embargo, escenas como la del Coliseo inundado e infestado de tiburones, dejarán huella en la memoria del espectador.
Y para finalizar en este apartado, tenemos a “Alien: Romulus” (en Disney+), una nueva entrega de la famosa saga, que sorprendió gratamente al público. El mérito aquí pertenece al director, el uruguayo Federico Álvarez, maestro del terror y el suspenso, que supo resetear la franquicia y devolverle sus colores oscuros y el miedo que se respiraba en la cinta original, además de algunos giros perturbadores en la historia (sobre todo en el desenlace). Situada entre “Alien”, de 1979, y “Aliens”, de 1986, nos encontramos con un grupo de jóvenes colonos espaciales que, con la ilusión de poder escaparse de una suerte de esclavitud en la que viven, buscan tomar el control de una estación espacial abandonada.
3- Anora
Un apartado especial nos pide esta cinta de Sean Baker, cineasta independiente responsable de películas de impiadoso tono realista como “Tangerine” (2015) y “The Florida Project” (2017). Este año, con “Anora”, se alzó con la mismísima Palma de Oro del Festival de Cannes, y eso vale la expectativa que viene generando desde entonces. Definida por distintos medios como “La anti-Mujer Bonita” o “la Pretty Woman recargada”, llegará recién a las salas argentinas el 23 de enero, aunque es estrictamente una película del 2024.
En este relato conocemos a Ani (Mikey Maddison), bailarina de un club nocturno neoyorquino, quien conoce a Ivan (Mark Eydelshteyn), el hijo de un poderoso oligarca ruso. Es previsible por dónde va la historia, pero lo conmovedor es la forma en que Baker la articula, llevándonos por derivas de desolación, crudeza y glamour.
4- Bonus: Simón de la montaña
Esta película, producida entre otros por la mendocina Frontera+, tuvo un estupendo debut en la Semana de la Crítica, del último Festival de Cannes, alzándose con el premio mayor y los aplausos unánimes. Ahora también se puede ver en Netflix.
Dirigida por Federico Luis, sigue la vida de Simón, un joven de 21 años que vive en un pueblo pequeño de la Patagonia y trabaja como ayudante de mudanzas junto a la pareja de su madre. Sin embargo, Simón está cansado de lidiar con los problemas familiares y experimenta una falta de sentido de pertenencia en los lugares que frecuenta, hasta que un día, a escondidas de sus padres, comienza a asistir a una escuela, donde se integra en un grupo de personas con discapacidad cognitiva haciéndose pasar como uno de ellos tras quedarse cautivado por sus personalidades.
Protagonizada por Lorenzo Ferro (“El ángel”), la película contó con impactantes locaciones mendocinas, en las que se pone en valor el paisaje cordillerano.
5- Las que aún no estrenan en Argentina
Para ir completando el panorama de lo que se ha estrenado este año, está ese grupo de filmes que llegan a las salas a principios del año siguiente, y muchas veces “apretados” en el calendario, con el fin de llegar a los Oscar con experiencia en sala. Aquí tenemos a algunas de las mejor ponderadas este año por el público que ha podido verlas en festivales y críticos.
El 2 de enero llega la esperada “Nosferatu” de Robert Eggers (“La bruja”, “El faro”, “El hombre del norte”). Se trata de la tercera adaptación al cine de este icónico vampiro, popularizado por el director Friedrich Wilhelm Murnau y el actor Max Schreck en 1922 y revisitado por Werner Herzog y Klaus Kinski en 1979. Ahora, corresponde a Eggers, consumado cineasta independiente de terror, el honor de volver a este personaje, ahora interpretado por Bill Skarsgård (“It”). Ese mismo día también estrena “Babygirl”, de Halina Reijn, con un desafiante protagónico para Nicole Kidman.
El 30 de enero estrena “María”, de Pablo Larraín. Con esta película cierra su trilogía de “mujeres desdichadas”, junto con “Jackie” y “Spencer”. Para retratar los solitarios y oscuros días parisinos de la soprano María Callas, antes de morir, puso su plena confianza en Angelina Jolie, en un tour de force dramático que ya la posiciona como una de las firmes candidatas al Oscar de Mejor Actriz. Ese mismo día, otra biopic llegará a Argentina: “Un completo desconocido”, en la que el director James Mangold relata los inicios de la carrera de Bob Dylan, interpretado magistralmente por Timothée Chalamet.