Florencia Padilla, conocida por su papel en la novela infantil “Rincón de Luz”, emprendió una nueva carrera como personal trainer, adaptándose a las circunstancias de la pandemia que afectó a muchas personas.
Esta talentosa actriz, que pasó de la actuación al mundo del fitness, ofrece clases personalizadas como entrenadora personal y compartió detalles de su transición en una reciente entrevista.
Florencia Padilla, nacida en Buenos Aires el 1° de julio de 1990, se esforzó para ser parte del universo de Cris Morena.
Participó en los talleres de la productora, donde aprendió canto, baile y actuación. Su dedicación y perseverancia finalmente dieron sus frutos cuando fue convocada para un papel en “Rincón de Luz”, la popular novela infantil.
La actualidad de Florencia Padilla
La pandemia de COVID-19 cambió su rumbo y despertó su interés en el mundo del fitness. “Esta pandemia me despertó las ganas de seguir perfeccionándome y creciendo”, contó.
“Soy partidaria de que no hay que hacer una sola cosa, hay que crecer. Me dediqué a estudiar. El deporte siempre me gustó y finalmente me recibí de personal trainer e instructora de funcional. Ahora doy clases personalizadas, pero no descuido mi carrera”, explicó en una entrevista reciente.
Florencia Padilla no se limita al entrenamiento físico. Además de su trabajo como personal trainer, ha regresado al teatro y también se dedica a la venta de ropa y calzado, considerándolo un hobby.
Ha participado en obras de teatro como “Casa Duarte”, una comedia de humor negro y una experiencia interactiva en la que el público juega un papel fundamental. También se unió a la obra “El diario de una puta”, una experiencia interactiva y desprejuiciada en la que el público participa activamente.
Padilla es consciente de los desafíos de vivir de la actuación y enfatiza la importancia de la constancia y la perseverancia en esta industria.
“Hay que tener constancia y perseverancia. A veces no te dan la oportunidad de mostrar todo lo que uno puede llegar a dar. Vivir de esto no es sencillo, pero no hay que quedarse ni esperar que te llamen. Hay que moverse constantemente”, señaló.