La reconocida actriz, Araceli González, compartió con sus seguidores en redes sociales que fue diagnosticada con SIBO, siglas que corresponden a “sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado”. La noticia había generado preocupación entre sus seguidores debido a los malestares que venía experimentando en la zona del estómago, pero finalmente, encontró respuestas y la posibilidad de abordar su salud de manera adecuada.
En sus historias de Instagram, González expresó: “Lo tomé con mucha calma, no me estresó el diagnóstico, porque ya sabés lo que tenés y podés abordarlo como corresponde”. Sin embargo, consideró este episodio como un llamado de atención en relación con su frenético ritmo de vida, especialmente por sus actividades empresariales, que le impedían tener una alimentación adecuada.
La actriz siempre se mostró cuidadosa con su alimentación, ya que según contó es intolerante a la lactosa y el gluten no le sienta bien. Sin embargo, el ritmo acelerado le dificultaba seguir una dieta equilibrada. Con el diagnóstico, González optó por tomar las riendas y llevar adelante un cambio en su alimentación, regresando al camino de comer bien y con los tiempos correspondientes. “Lo tomé muy tranquila, no puedo hacer nada, son los stops que nos pone la vida cuando uno está muy acelerado y no se da cuenta. Lo bueno es estar lúcido para darse cuenta a tiempo” manifestó.
A pesar del diagnóstico, Araceli González mantuvo la calma y propuso a sus seguidores hacer lo mismo: “Veo que hay un acelere del otro lado. Muchos, que como yo, no sabían lo que es, muchos que saben todo y te recomiendan nutricionista, y la verdad que no me asusta la dieta, al contrario, me pone muy bien”, incluso prometió mantener el feedback con sus seguidores para mantenerlos al tanto. “Lo más importante es tener el diagnóstico, muchas veces nos sentimos inflamados del abdomen, constipados, mal de los intestinos, que nos cae todo horrible. Es importante ir a un médico para saber qué tenemos y nos trate como corresponde” enfatizó.
Además, la actriz agradeció a una amiga de su hija, Flor Torrente, que también enfrentó el síndrome y le recomendó a una nutricionista para su tratamiento.
Junto a su pareja, Fabián Mazzei, contó que investigaron sobre el SIBO y optaron por una dieta que recuerda a la que llevaba tiempo atrás. Finalmente, compartió su merienda del sábado por la tarde, que se basa en su nueva alimentación, incluyendo café no torrado sin azúcar ni stevia, leche de almendras sin azúcar, queso untable de castañas de cajú y galletas de arroz sin lactosa ni azúcar.
QUÉ ES EL SIBO:
El SIBO (Síndrome del Intestino Delgado Sobrecrecimiento Bacteriano) es una condición médica en la cual hay un crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado. Normalmente, el intestino delgado contiene una cantidad limitada de bacterias, pero en personas con SIBO, estas bacterias proliferan más allá de lo que se considera normal.
Este crecimiento excesivo de bacterias puede causar diversos problemas digestivos y síntomas, como distensión abdominal, flatulencia, diarrea, estreñimiento, dolor abdominal y malabsorción de nutrientes. También puede conducir a deficiencias de vitaminas y minerales debido a la alteración de la función intestinal.