Quizás lo conozcas por ser el chico que con una camarita mostraba ciudades como Nueva York, París o Estambul en la tele. Agustín Neglia (41), es conductor y periodista mendocino que siempre soñó con estar al frente de un programa y de conocer lugar incógnitos del mundo.
Con su astucia, entusiasmo, voluntad y perseverancia, pasó de ser un joven de barrio que estudiaba en la UNCuyo a ser una personalidad reconocida en el mundo del turismo y espectáculo. Su programa Modo Selfie, es quizás el que hizo que su fama aumentara exponencialmente, y conquistara a millones de personas con su forma de mostrar y llevar al living del hogar distintas ciudades icónicas del globo.
En una entrevista con Los Andes, el conductor cuenta cómo inició su carrera, qué balance hace de su 2024 y cómo se prepara para su boda con su novia Mariana Rojas de cara al 2025.
- ¿Cómo te diste cuenta en tu infancia que amabas la comunicación?
Desde chiquito que jugaba a la radio, a la tele. Salía a la calle con una camarita vieja que era de mi papá y le hacía entrevistas a la gente y tenía algunos amigos siempre que me seguían. A parte en casa tenía armado como una especie de radio y jugaba eso; te estoy hablando como a los 8 o 10 años.
Después, como en tercer o cuarto año de la secundaria empecé a repartir como propuestas por distintos locales del centro diciendo que iba a hacer un Late Night Show a la noche, un programa de tele nocturno, porque veía que Canal 9 en ese entonces tenía una programación que terminaba a las 11 o 12 de la noche; y en ese momento la gente no se iba a dormir, la gente quería seguir viendo tele y nadie hacía tele, entonces bueno, de repente un día me llaman de Canal 9 y me dicen “escucha, ¿Vos estás diciendo que va a ser un programa en Canal 9?”, entonces le dijo que sí y me preguntaban cómo si todavía no había hablado con ellos. Le dije que estaba buscando los sponsor y una vez que los tenga arrancábamos y bueno, se mataron de risa. Pero como para contarte un poco que previo a la facu, ya tenía muy en claro, que quería hacer televisión.
- ¿Cómo eran tus días de estudiante en la UNCuyo?
Cuando entro a la facu ni en pedo iba a estar 6 años estudiando comunicación sin practicar sin hacer lo me gustaba, así que apenas arranqué la facultad empecé a tratar de hacer algo real y fui a radio Nihuil, golpee la puerta y nada me propusieron hacer como un programa de radio que terminó siendo un programa diario que salía de lunes a viernes a las 9 de la noche, se llamaba “Memorias de mi Ciudad” y fue un flash porque fueron dos años de hacer eso. Yo tenía 19 años y esa conducción en radio Nihuil en ese momento era como que te escuchaba todo el mundo, era una locura. Estoy hablando hace 20 años, un montón, así que bueno, mis días de estudiante fueron como con mucho vértigo porque paralelamente siempre estaba haciendo cosas.
Todo el tiempo en la Facultad de Ciencias Políticas era que te interrumpan los chicos del centro de estudiantes para dejar mensajes y bueno, era como medio caótico todo y como yo estaba laburando, me cansó en algún punto la facu y me cambié a la Universidad de Congreso y seguí estudiando comunicación ahí.
- ¿Cuándo hiciste el click para tomar la decisión de irte a Buenos Aires?
En medio de mi trabajo en radio Nihuil me surge una propuesta para meterme en la parte comercial del Mercurio de Chile, tenía 20/21 años en ese momento. El Mercurio es como el diario más leído de Chile imagínate, e iba a abrir una oficinita comercial muy chiquitita en Mendoza. Eran bastantes personas y a los dos meses ya no quedaba nadie porque no te pagaban sueldo sino por comisión; y ahí me di cuenta que había un potencial enorme, así que empecé a ofrecerle a los distintos organismos de Turismo de las Provincias de Argentina que se promocionen en Chile porque el diario era una bomba, así que empecé a armar como revistas adentro del Mercurio sobre Argentina y a los 22 años ya estaba como haciéndole facturar al diario bastante y haciendo un contenido como muy copado, así que esa fue mi experiencia más como de diarios.
Y ahí es cuando se enteran de Televisa que que yo estaba haciendo esto en Mendoza. Una persona de Chile que en ese momento como que manejaba todo el Cono Sur de de Televisa, me contrata para irme a Buenos Aires y ahí me ponen como jefe de ventas de todas las revistas de Televisa y bueno fue muy loco porque tenía 22 años y ya estaba como con un cargo de ejecutivo y todos los chicos con los que trabajaba tenían 10 años más que. Pero la verdad es que paralelamente yo seguía haciendo en ese momento un programa de tele que era como de deportes de acción y al aire libre que se llamaba “Fusión TV” que sigue estando, o sea, como 600 programas.
En ese momento yo producía el programa con un amigo, y le dije que no me gustaba lo que estaba haciendo en Televisa de las revistas y que a mí me encanta la tele, así que renuncié a todo en Buenos Aires y me abrí como mi propia productora a los 24, y ahí empecé a hacer tele y después de varios años de remarla mucho, de tener altibajos porque la verdad es que renuncié a un laburo que tenía un súper sueldo y empecé a hacer lo que me gustaba casi en la lona sin un mango, habiendo vendido el auto que tenía, casi todo lo vendí menos la cámara porque sabía que en algún momento la íbamos a pegar.
- ¿Cuáles son los obstáculos más difíciles que tuviste que afrontar para desarrollar All Inclusive?
Un día en un viaje que hago a Cancún de casualidad, (había un dos por uno tipo entre Navidad y Año Nuevo y salía muy barato ir a Cancún y dije bueno, nos vamos a Cancún) y en ese momento grabo un piloto de un programa en un “All Inclusive” y mostraba cómo era las excursiones que tenías por ahí cerca para hacer, y se lo mandó a una empresa de viajes que estaba en Rosario que era un Mayorista de Turismo.
Ahí el tipo nos dice “hace seis meses que está tratando de hacer algo así y ustedes me lo mandaron como listo, es increíble” y salió ese laburo que fue irse a vivir a Rosario primero para ser “All Inclusive”. Fue el programa que cambió un poco mi historia porque empecé a vivir de la televisión y a viajar y fue una locura. Fueron dos o tres años de viajar por todos lados. Los obstáculos fueron todos los que te conté, armar la productora, ver qué contenido podían llegar a armar, que a la gente le guste.
- ¿Y Modo Selfie? ¿Cómo surgió esa idea?
Cuando no me quedaba más contenido para producir, empiezo con un contenido nuevo que se llamaba “Enrutados” y fue como la antesala de “Modo Selfie”. Era como un reality de dos amigos que viajaban en bondi por toda Europa, estaba re divertido. Pero después de eso vino otra etapa porque yo ya venía medio cansado de viajar con mucha gente, o sea, de viajar con un camarógrafo, con un productor, con un sonidista, entonces un día viajo solo por una invitación que tenía en Europa y me llevo una camarita que tenía, una GoPro y un par de cosas más, pero solo eso y lo grabé todo solo y me filmaba a mí mismo y me acuerdo de caminaba por la calle te estoy hablando 2014 y la gente me miraba diciendo ¿Este pibe que hace, le habla solo a la cámara era? Como que no existía la toma selfie todavía y así surgió Modo Selfie, fue una locura y después tener varios programas armados logré meterlos en Canal 7 y de ahí saltó al poquito tiempo a América y ahí fue como cuando empezó todo lo de la tele fuerte.
- ¿Cómo es el trato con los argentinos cuando te encontraban en los viajes?
Súper. Entrevistamos a más de mil argentinos, imagínate qué modo selfie solo tiene casi 500 programas en donde cada uno tiene de dos o tres argentinos. Entrevistamos a un argentino que tiene un restaurante en Miami y que es amigo de Lenny Kravitz, de Calle 13, lo que se te ocurra, es una bestia. Entrevistamos también a un loco mendocino que dirige la estación de la NASA que está en Europa en Múnich, también entrevistamos a Pagani hace poquito, el diseñador de autos argentino que hace los superautos de 4 o 5 millones de euros y me recibió en su fábrica. Y así te puedo decir mil cosas que hicimos que fueron re locas y y bueno fueron surgiendo así muy a pulmón con un laburo de producción previo.
- Si tuvieras que hacer un balance del 2024, ¿Cómo lo describirías? ¿Qué metas sentís que cumpliste?
Mira este año sacamos la cuenta para un reel que vamos a subir en unos días y calculamos que le dimos seis vueltas al mundo, visitamos casi 70 ciudades, más de 10 países. Tuvimos más o menos casi 100 horas de cambio de horas tremendo y en distancia recorrida en avión fueron 250.000 kilómetros. Todo eso este año. Fue un 2024 súper vertiginoso y bueno, el balance es felicidad total, cansancio, tratar de reinventarse todo el tiempo. Hicimos más de 200 reels para Instagram o sea, estamos muy enfocados en las redes sociales con contenido paralelo al margen de lo que es la tele y bueno, es una locura, o sea, no esto obviamente uno lo ve armado con un equipo que es editor productor que están siempre todos los días viste a la par siguiéndome y llevándome la punta en un montón de cosas.
- ¿Cuáles te quedan por cumplir en el 2025?
En lo profesional se viene algo muy grande, algo que no puedo contar ahora, pero tal vez sí que lo puedo contar en dos semanas. Va a ser un contenido que estamos preparando para que se vean toda Latinoamérica y que va a ser una bomba. Es un contenido superador de lo que ya venimos haciendo de viaje de gastronomía y lifetime por América.
- ¿Cómo vienen los preparativos para el casamiento con Mariana? ¿Ya tienen fecha y lugar?
El casamiento seguramente sea en noviembre, seguramente sea en México y la idea es hacerlo como algo muy para la familia y algunos pocos amigos en algún hotel All Inclusive, todos juntos quedándonos una semana entera y el último día haciendo la ceremonia de la boda; pero va a ser más una celebración del amor y eso el civil obviamente creo que lo vamos a hacer acá en Argentina.
Va a estar muy divertido, un poco la idea de casarnos afuera es poder compartir con con nuestra familia y con todos nuestros amigos un viaje con una excusa así. Nadie nos puede decir que no y la verdad es que nunca tuve la posibilidad de hacer como un viaje con todos mis hermanos, con mis viejos y con mis amigos.
Casarme en realidad es como darle un título a algo que desde el primer día que estamos juntos con Marian lo sentimos. El compromiso existe desde el primer día, pero creo que vale la pena darle como una entidad a este tipo de cosas, al amor, a las relaciones y ponerlas en un cuadrito, atesorarlas para toda la vida; digo que la verdad es que no sabemos cuánto tiempo vamos a estar acá y uno a veces posterga ese tipo de cosas que son las mejores ¿no? como casarse, hacer las fotos del casamiento con todos los amigos, contratar una banda, bailar hasta cualquier hora, hacerlo al atardecer todas esas cosas nos ilusionan mucho.