Este lunes se vivió un nuevo “congelados” en Gran Hermano en donde los participantes reciben la visita de un familiar mientras deben contener sus emociones y no moverse. En esta ocasión, fue el turno de Agostina Spinelli quien se emocionó al ver a su hija Morena.
La policía no se contuvo y rompió en llanto al reencontrarse su hija de 16 años luego de dos meses de aislamiento. El momento fue el más conmovedor de la noche y emocionó a todos en la casa.
Agostina vio a su hija Morena en Gran Hermano y rompió en llanto
Esta semana se vivieron grandes cambios y sorpresas en Gran Hermano tras el primer repechaje, donde regresaron Catalina, Joel e Isabel. Debido a la unión entre la médica pediatra y Furia, Agostina se sintió traicionada por su compañera y atravesó un momento de angustia en la casa.
Sin embargo, este lunes recibió una gran sorpresa y no pudo evitar emocionarse hasta las lágrimas. En el cuarto “congelados” de este año, la poli se reencontró con su hija Morena, de 16 años y el momento conmovió a todos.
Al ver entrar a su hija, Agostina tuvo que luchar con todas sus fuerzas para contener sus emociones y no moverse durante la prueba. Sin embargo, no pudo evitar romper en llanto al escuchar las tiernas palabras de su hija.
“Quiero que sepas que estoy muy feliz. No te das una idea de lo feliz que estoy por vos. Me llenás el corazón de orgullo de una manera que no te podés imaginar. Sos la mejor del mundo”, le dijo Morena a su mamá.
Luego, la adolescente recorrió la casa y antes de marcharse le dio un fuerte abrazo a su madre y se despidió con emotivas palabras. “Te amo, me llenás el corazón de orgullo.”
Al terminar la prueba, los hermanitos corrieron a consolar a Agostina, quien se lamentó por no poder abrazar a su hija. Además, expresó sentirse muy sorprendida por la conducta de la joven. “Entró con toda la actitud. Ella no es así, es vergonzosa pero estaba tranquila”, comentó.
El ingreso de la hija de Agostina en el “congelados” llenó de lágrimas no sólo a los participantes sino también a la audiencia debido a la sincera y conmovedora reacción de la policía.