Con la declaración de algunos médicos especialistas se realizó la segunda jornada del juicio contra el médico Carlos Gustavo Arzuza (49) y su pareja, la "asistente" de origen rumano Laura Dutta (40), ambos acusados por la muerte de una paciente que falleció días después de que fuera sometida a dos cirugías estéticas realizadas por el cirujano en una clínica sin habilitación.
Arzuza es juzgado por el delito de homicidio simple con dolo eventual por la muerte de Isabel Gattari (48). Dutta es juzgada por ejercicio ilegal de la medicina, delito que tiene penas de hasta un año de cárcel. Ambos llegaron al debate en libertad.
El primer testigo que declaró ayer ante los jueces Rafael Escot, Gabriela Urciuolo y Diego Lusverti fue el anestesiólogo Miguel Cerdá, ex presidente de la Asociación Mendocina de Anestesiología. El especialista se refirió a las condiciones en que se debe suministrar anestesia a un paciente, algunas de las cuales el médico Arzuza no cumplió a la hora de operar a Gattari.
Cerdá dijo que es obligatoria la presencia de un anestesista en las operaciones de cirugía estética y que deben hacerse estudios previos para evitar "riesgos anestesiológicos".
Cuando la fiscal de Homicidios Claudia Ríos Ortíz le preguntó si todos los médicos seguían todos los procedimientos, el testigo dijo: "No, según la preparación de cada médico", agregando que en caso contrario "el riesgo en las intervenciones es alto".
También declaró la médica Andrea Lafalla, quien confirmó que la necropsia incluyó análisis específicos para determinar qué sustancias se encontraron en el cuerpo de la víctima. La especialista enumeró una larga serie de inductores de sueño, antibióticos, analgésicos y antidepresivos, uno de ellos en una dosis considerada "letal".
El caso
El 2 de diciembre de 2016, "Betty" Gattari se sometió a un implante de glúteos y una lipoaspiración en la clínica no habilitada que tenía Arzuza en Alem al 300 de Ciudad.
Al día siguiente comenzó a sentirse mal en su casa, en un barrio privado de Guaymallén. Ese día Dutta fue al lugar y le colocó suero.
El miércoles 7, al mediodía, su novio la encontró tirada en el piso en su casa. Llamaron a Arzuza pero, cuando el médico llegó, la mujer había fallecido.