Las imágenes más llamativas de los Juegos Olímpicos de Invierno son las del equipo noruego de curling. Los miembros del equipo noruego usan unos llamativos pantalones que han despertado todo tipo de comentarios en las redes sociales.
No es la primera vez que el equipo noruego de curling viste este tipo de pantalones. Ya en Sochi 2014 y en varias de las competiciones previas los noruegos sorprendieron con diseños similares.
Porque para cada competición los cinco deportistas eligen pantalones de estampados estrafalarios, siempre diferentes, y en blanco, rojo y azul marino, los colores de la bandera de su país. Los motivos, todos geométricos, combinan cuadrados, rombos y ondas.
Más allá de gusto estético, se trata de una cábala del equipo. En 2010, cuando participaron de sus primeras olimpiadas, implementaron este vestuario y en 2014, en el mundial de ese deporte que se jugó en Pekín, lucieron equipos similares. Mientras que en esta competencia, eligieron un traje chaqueta con conjunto con un estampado abstracto.
Otros momentos memorables: en San Valentín usaron un diseño con corazones en rosa y fucsia y para Halloween, otro modelo alusivo.
“Nos pareció que el uniforme original, en negro y gris, era demasiado apagado y aburrido y, además, queríamos un poco de salsa y colorido y lucir los colores de la bandera noruega” explicó uno de los jugadores a un medio de Estados Unidos.
Entonces, una vez decidido el cambio, compraron varios pantalones por Internet, a una marca que se dedica a fabricar ropa deportiva con un toque audaz. El resto, agregó en esa nota, “es historia”.
Los efectos de esta decisión: resultados favorables, aunque con reciente dopping positivo que empañó la buena racha.
Aunque, si se trata de su vestuario, el éxito es absoluto. Sus seguidores copian el estilo y recopilan sus modelos en varias cuentas de Facebook.