Una mañana como cualquier otra en la escuela 1-320 Cristóbal Colón de Las Vegas, Potrerillos, los 96 alumnos asisten a clase, intentan dar lo mejor de sí mismos y cuando llega la hora indicada salen al recreo.
Mientras tanto los padres y directivos se reúnen en el patio, no para organizar algún festejo o para charlar de sus actividades cotidianas sino para reclamar la falta de respuestas a sus pedidos ante la Dirección General de Escuelas (DGE).
"Seguimos postergados desde hace más de 20 años. El establecimiento se mantiene porque los papás la cuidamos, pero la DGE nunca viene a ver qué hace falta", aseguró Pedro Maeda, quien tiene dos nietos en la institución.
"A los de la montaña no nos dan mucha bolilla porque estamos lejos, porque somos pocos", agregó Claudia Garay, una de las tantas madres preocupadas.
La convocatoria comenzó por un reclamo puntual: la falta de agua potable en la escuela porque Infraestructura de la DGE se llevó una bomba clorinadora que se utiliza para colocar gotas de cloro en el recurso vital. Justamente ayer, después de más de un año de solicitarla, la pusieron en funcionamiento.
"Especulan hasta último momento. Cuando les dijimos que íbamos a llamar a los medios ahí nos la arreglaron", manifestaron los papás enojados y bastante cansados. "Anoche a las 20 mandaron a una persona a revisar la bomba, porque habían traído una nueva que no funcionaba y la dejaron andando.
Por ahora está solucionado", detalló Marisa Giacca, directora de la institución quien relató que mientras no tenían agua potable, fundamental para que funcione el comedor que alimenta a los chicos, se manejaron con camiones que mandaba la Municipalidad de Luján.
Pero lamentablemente la lista de reclamos no termina ahí sino que continúa: "Tenemos baches en el patio y en la cancha por lo que los estudiantes se caen, se tropiezan y ya hemos tenido varios lastimados. Es un tema prioritario y que con unas bolsas de cemento se puede solucionar, pero la respuesta es siempre la misma: no hay presupuesto", comentó la directiva.
Otro aspecto que buscan solucionar son dos obras deficientes que se llevaron a cabo en la anterior gestión de la Dirección de Escuelas: "Tenemos tres tanques de 1.000 litros de agua con dos bombas que no funcionan hace más de un año y medio y que sirven de reserva cuando el agua de Irrigación se corta. Se nota que la instalación es muy rudimentaria ya que en el mismo lugar hay cables de electricidad mal colocados que presentan un potencial riesgo", narró la mujer.
Lo segundo es un pozo séptico que no se puede utilizar porque está mal construido: "Al parecer nadie inspeccionó la obra. Cualquiera puede darse cuenta de que el desnivel está mal hecho", destacó.
En relación a este último punto para los padres hay "algo oscuro detrás. No puede ser que se gaste dinero en limpiar los pozos y no se los arregle. Pasa lo mismo en las otras escuelas de la zona", denunció Fabiana Droghuei y agregó: "Que no negocien con la plata de la educación. Desde hace mucho tiempo pedimos cosas básicas y no tenemos respuestas. Ahora empezamos con esto pero la próxima vamos a hacer más alto el reclamo", adelantó apoyada por el resto.
Plurigrados
Un detalle que llama la atención apenas uno ingresa al edificio del colegio Colón, son un grupo de 8 chicos de segundo grado que diariamente cursan en el pasillo con su maestra.
Esto se da, según explica Giacca, porque al ser un establecimiento de frontera tiene secciones plurigrado, es decir que los niños de 4 y 5 años comparten salón y educadora, al igual que los de primero y segundo grado y los de tercero y cuarto.
"Como hemos visto que los de segundo necesitan un refuerzo, no nos queda otra que separarlos y como no tenemos espacio trabajan en el hall. Le he pedido biombos a Infraestructura de la DGE, pero me dicen que no hay", recordó la responsable de la institución a la vez que afirmó que el hecho de compartir el aula con chicos de otro año les implica un doble esfuerzo.
"Hay muchas escuelas que están trabajando en la misa forma. Lo que hay que lograr es que aunque sean 5 chicos por curso, estén con su maestra separados. Al sistema debería dejar de interesarle la cantidad de alumnos y privilegiar la calidad", expuso.
Con respecto al nivel inicial, tanto los papás como los docentes y directivos, solicitan la construcción de una sala y un baño para que sea independiente del colegio:
"Nos hace falta un baño y un aula para los chicos de 4 y 5, que actualmente tienen clases en parte de lo que era el comedor que se dividió y van al mismo baño que los más grandes", apuntó Pedro Maeda. Desde el área de prensa de Infraestructura de la DGE decidieron no emitir opinión hasta tanto no se publique la nota del reclamo de la comunidad de la Colón.
Más reclamos
Otro pedido del personal es el reconocimiento de las horas extra que trabajan ya que, según cuentan, hacen jornada completa y reciben el pago por jornada simple.
"Los docentes trabajamos la jornada completa porque es histórico acá, en Río Blanco y en Agua de las Avispas. Pero no se nos reconoce lo que trabajamos. Después de las 13 hasta las 15.30 no se nos paga", enfatizó la directora.
En este horario las maestras acompañan a los niños en el comedor y les enseñan buenos modales, pero como no se las cuenta en las raciones de los chicos, tienen que pagar extra para alimentarse.
"Tenemos que poner de nuestros bolsillos", agregó a la vez que recalcó la calidad de los 14 maestros que trabajan en la escuela con mucho cariño y amor por los niños, a pesar de todos los inconvenientes. Por otro lado, los padres están pidiendo una extensión de la secundaria de la Villa de Potrerillos en Las Vegas que sólo cuenta con primaria. "Para nosotros sería importante para que no estén viajando todos los días", señalaron.
