Los senadores de la Nación se aumentaron los sueldos a 4.500.000 de pesos netos, mientras el sueldo mínimo de cualquier ciudadano apenas si alcanza a 202.800 pesos.
Para los trabajadores significa casi 23 veces más. Lo extraño es que la decisión de aumentarse las dietas fue unánime y en silencio. Cómo pueden los legisladores ignorar el rechazo que esto provoca en el pueblo que la está pasando mal, a veces sin recursos para comprar comida. Es difícil que escuchen, pero no rifen la democracia que tanto nos costó recuperar.
* Héctor Antinori. DNI 5.471.521.