El Barrio Urbano La Sierra, ubicado sobre Panamericana justo antes del nacimiento de la calle Guardia Vieja, al día en que se escribe esta carta, 30 de diciembre, lleva diecisiete días consecutivos sin agua. Se trata de un barrio de gente trabajadora que paga el servicio de agua potable.
Mientras tanto, es vox populi, hay una serie de tomas clandestinas que extraen agua a lo largo de toda la cañería. ¿Quién hace la vista gorda?
Porque no ha de ser demasiado difícil constatar ese robo a lo largo de una línea.
Se han hecho cortes de Ruta, han visitado el Barrio canales de televisión, pero los resultados siguen siendo los mismos. Y no es un problema puntual; desde hace años que subsiste.
No puede haber tanta insensibilidad de parte de los responsables. Y no es justo, que cerca de zonas privilegiadas de Mendoza, exista esta situación en un barrio colmado de niños, y con las altas temperaturas de la época, sumado al tema pandemia que nos afecta a todos. Esperamos que este medio ayude a que se ponga remedio definitivo al problema.