“El Gobierno quiere que las motos sean una alternativa al servicio público de pasajeros, y por eso va a fomentar el uso de las dos ruedas, para que la gente pueda llegar a su trabajo más fácilmente”, comentó Lino Stefanutto, titular de la Cámara de Fabricantes de Motos (Cafam).
La moto, por concepto y naturaleza jurídica, nunca puede ser una alternativa del servicio público de pasajeros, precisamente por ser un servicio público. Desacertadas las palabras del empresario que muestra un desconocimiento importante del tema.
Interesante será conocer lo que el Gobierno quiere, en palabras de un funcionario que lo represente institucionalmente en materia de transporte, movilidad y seguridad vial, ya que la moto en manos de “cualquiera”, sin licencia otorgada en forma eficiente, participa en casi cuatro de cada diez siniestros viales graves, con una altísima tasa de morbi mortalidad.
A fines del siglo pasado y luego de “desregular” el servicio público, fomentar su caída en los centros urbanos con menos de 150.000 habitantes, los ciclomotores (hasta 50 cc de cilindrada) se vendían en los supermercados, y se retiraban sólo exibiendo el DNI y abonando la primer cuota. Ahora se propone entregarles con una primera cuota de tres mil pesos una moto de 110 cc como mínimo.
¿Quién se hará responsable en el Gobierno de “solucionar” la pandemia del coronavirus agravando la pandemia vial?
* Abogado. DIrector ISEV (Instituto de Seguridad y Educación VIal (UBA)
