Malvinas, dolor y heridas que no cierran

Me pregunto cómo puede ser que quien expresó su admiración profunda a la criminal de guerra Margaret Thatcher, hoy se sienta conmovido por el 2 de abril y por quienes sufrieron las consecuencias de esa guerra injusta y desigual.

Pasé el 2 de abril leyendo infinidad de notas de argentinos que evocaban a nuestros héroes y honraban su memoria, publicadas en las diferentes redes sociales que hoy tenemos a disposición para expresar nuestros pensamientos y sentires.

Sin embargo, dado el resultado de las elecciones de 2023 y apelando a la ley de las probabilidades, asumo que un alto porcentaje de esos mensajes fueron enviados por quienes entonces pusieron su voto para que el actual presidente llegara a la máxima magistratura de nuestro país.

En ese estado me preguntaba sin encontrar respuesta, cómo puede ser que quien eligió en su momento a quien predicó (y predica) su admiración profunda a la criminal de guerra Margaret Thatcher, aborrecida por nuestro pueblo dada su caprichosa e ilegal orden de hundir el crucero General Belgrano (entre otros males que causó a nuestro país), hoy se sienta conmovido por el 2 de abril y por quienes sufrieron las consecuencias de esa guerra injusta y desigual. Guerra que fue promovida por un gobierno de facto, que, para ocultar sus fracasos, nos sumió en una loca aventura que terminó con otro fracaso más grave aún y que aún nos duele en nuestro cuerpo y alma y que será muy difícil de erradicar hasta creo, el momento en que las recuperemos y las hagamos nuestras para siempre…

No me cierra, no encontré la respuesta que me hice y por más que me esfuerzo, no logro hacerme de ella.

Roberto Colucci. DNI: 6.899.440

LAS MAS LEIDAS