Laura Montero buscó consolidar su "espacio". No un sector mayoritario en la UCR, pero sí propio y sostenerlo como bastión no cornejista. La vicegobernadora intentó colar a su gente en las listas de candidatos y poco consiguió. Tan poco logró que en el sur de la provincia tuvo que poner en la contienda una lista propia sin candidato a gobernador para competir en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) con los candidatos de Alfredo Cornejo.
Es una pelea desigual. La mayoría del radicalismo es cornejista (al menos por ahora). En los últimos años sólo plantó bandera Fernando Armagnague, un eterno cruzado acostumbrado a la derrota, que ahora encabeza su lista de candidatos para competir con Rodolfo Suárez y Omar de Marchi.
Entre lo que no es cornejista de la UCR están también los seguidores de Julio Cobos, quizá el sector más importante y que negoció con el gobernador la fórmula que representará al radicalismo en las PASO contra el macrista De Marchi.
En algún momento Montero era parte del sector de Cobos. Hace cuatro años fue parte de la fórmula que ganó las elecciones justamente porque Montero era la pata "cobista" del binomio. Hoy parece que los destinos de ambos se han bifurcado.
Hoy la vice está sola al mando del Senado provincial y en la elección que se viene intenta ubicar a algunos de sus cercanos para consolidar un pequeño espacio que la mantenga con algo de poder dentro del radicalismo.
En las negociaciones no le fue muy bien. Pretendió poner a Mariel Vanín como precandidatas a intendenta de Santa Rosa que compitiera con la cornejista Norma Trigo y no pasó. Para la Ciudad de Mendoza Montero empujaba a Sandra Gómez, ex secretaria de Gobierno de esa comuna en épocas de Víctor Fayad y actual asesora en la Legislatura; tampoco pasó.
Podría argumentarse que dos candidatos radicales dividían el voto y facilitaban las cosas a De Marchi en la PASO, más aún en Santa Rosa, dónde la precandidata del lujanino es astilla del mismo palo radical: la concejal Débora Quiroga, quien quiso ser intendenta en 2015 y fue derrotada por Sergio Salgado.
La vicegobernadora buscó colocar a tres de sus colaboradores de la Legislatura que tampoco pasaron: el secretario legal y técnico PedroMosso, el director de la Unidad de Enlace Marcelo Barceló, y la secretaria legislativa Andrea Lara.
En el sur tiene candidatos propios. Montero tiene un candidato a intendente de Malargüe, el actual concejal Juan Manuel Ojeda, quien competirá con el aspirante que tiene el aval de Cornejo, el presidente del Concejo Deliberante Fernando Glatigny. Ojeda tiene sus candidatos a concejales, como también Glatigny los tiene.
En ese departamento la vicegobernadora tendrá la boleta con más categorías, porque tiene las dos municipales y también las dos senadores y diputados provinciales. Cosa que no sucederá en los otros dos municipios del sur.
En San Rafael y General Alvear, Montero sólo tendrá las boletas de las dos categorías de legisladores provinciales. Apenas dos tramos, sin el ítem principal, los aspirantes a la gobernación, quiénes serán los más buscados por los electores en la PASO de junio.
En este comicio se van a elegir sólo cargos provinciales y 14 intendentes y sus concejales; hay 18 comunas, pero cuatro de ellas también desdoblaron la elección de jefe comunal y concejales, una de ellas San Rafael, dónde se elegirán sólo gobernador, vice, diputados y senadores provinciales. En ese departamento tendrá dos categorías de candidatos y tal vez pueda disimular la falta de aspirante a la gobernación.
Entre los candidatos a legisladores del sur (cuarto distrito electoral), está el actual secretario privado de la vicegobernadora, Luciano Romero Moscarelli que aspira a una banca de diputados.
En San Carlos hay tres listas de candidatos a intendentes y concejales. Una responde al actual intendente Jorge Difonso y lleva como gobernador a Suárez, la segunda tiene como candidato a gobernador a De Marchi. La tercera es boleta corta, no tiene candidatos a gobernador, ni a legisladores, sólo intendente y concejales. El primer aspirante a edil es Gerardo Busse, otro colaborador de Montero en el Senado provincial.
Claves
El poder y los cargos. Una de las máximas de la política es que para consolidar poder hace falta sumar nombres propios que permitan incidir en las políticas. Montero no los ha conseguido.
Le llaman la "bien querida". De la gente del entorno de la Vicegobernadora, la que logró una candidatura "entrable" es la actual senadora Daniela García, que va en primer término la lista de diputados.
El dilema de la boleta corta. En las elecciones, las miradas del electorado están puestos en el tope de la boleta. Montero tiene una lista de legisladores del sur, pero sin aspirante a la gobernación.
Los que sí lograron lugar
En la elección adelantada de Tunuyán Montero logró colocar un nombre: el segundo candidato a concejal es el actual responsable de Relaciones institucionales del Senado Sebastián Pelletán. El problema es que si el peronismo repite los porcentajes de la PASO, tal vez Pelletán no ingrese al concejo.
La única legisladora que cercana a Montero que va en un lugar entrable es Daniela García. En 2015 García fue electa senadora provincial. Ahora va en el primer lugar de la lista de diputados del primer distrito (Hay cuatro distritos electorales en Mendoza y en cada uno se eligen legisladores que representen a su región).