El comandante opositor sirio que apareció en un video arrancando y mordiendo los órganos del cadáver de un soldado sirio amenazó con asesinar a todos los alauíes, el grupo religioso al que pertenece la familia presidencial.
Jalid al Hamad
confirmó, en una entrevista concedida vía Skype a la revista estadounidense Time, que el video que lo muestra profanando el cadáver es real y aseguró que comió un trozo de los pulmones del soldado sirio.
Al Hamad, también conocido como el comandante Abu Sakar, su nombre de guerra, relató que tiene otro video en el que está cortando a otro soldado con una sierra, ôcomo la que usan para cortar árboles“, y precisó que lo corta "en trozos grandes y pequeños".
Además expresó que espera que con la publicación de las imágenes en Internet las fuerzas gubernamentales no vuelvan a pisar nunca más "la zona controlada por Abu Sakar".
El comandante opositor justificó sus acciones en la brutalidad del gobierno presidido por Bashar Al Assad y envió a la revista distintos enlaces a videos en
YouTube
para confirmar sus dichos.
Al Hamad relató que arrancó y mordió los órganos del soldado sirio porque abrió su teléfono celular y vio un video "de una mujer y sus dos hijas desnudas a las que estaba humillando y golpeando" y recordó que el levantamiento contra Al Assad comenzó ôen forma pacífica“.
"Fueron los alauíes los que mataron a nuestros hijos y violaron a nuestras mujeres en Baba Amr", afirmó Al Hamad en referencia a los combates de febrero de 2012 en Homs."No empezamos nosotros, lo hicieron ellos", agregó.
"Nuestro lema es ojo por ojo y diente por diente", afirmó el opositor y añadió que "con un poco de suerte conseguiremos matar a todos" los alauíes.
En otro tramo de la entrevista, criticó la condena de la comunidad internacional, que quiere investigar los crímenes de guerra cometidos por la oposición y se preguntó por qué la ONU no cuestiona al grupo shabiha, que "publicó un millón de videos apuñalando y violando".
Shabiha es un grupo armado alauí acusado de actuar como agentes no oficiales del gobierno sirio.
El domingo se difundió un
en el que se ve a Al Hamad, fundador de la
Brigada Faruk
, extraer con un cuchillo el corazón y el hígado del cadáver de un soldado del Ejército sirio y se lo lleva a la boca.
"Juro por dios que vamos a comer vuestros corazones e hígados, soldados de Bashar, perros. Mártires de Baba Amr, matad a los alauíes y sacad sus corazones para comerlos", dice a cámara el comandante opositor Abu Sakar, vestido con uniforme militar.
La opositora Coalición Nacional Siria (CNFROS) rechazó en un comunicado este acto y señaló que "no está relacionado con la moral del pueblo y los principios del Ejército Libre Sirio (ELS) que defiende la dignidad del ciudadano".
El grupo Human Rights Watch (HRW) también se refirió al video a través de un comunicado en el que instó al ELS y a la CNFROS a adoptar las medidas que sean necesarias para que los crímenes de guerra sean castigados y para evitar abusos de este tipo.
Además, volvió a pedir al Consejo de Seguridad de la ONU que la Corte Penal Internacional (CPI) investigue los crímenes de guerra y contra la humanidad en Siria.
"Es un paso importante para detener los horrores y arrebatar la sensación de impunidad", aseguró el subdirector de HRW para Medio Oriente, Nadim Houry.
"Las atrocidades son impactantes, pero también lo es la obstrucción por parte de algunos miembros del Consejo de Seguridad, que todavía no apoyan que la CPI investigue a todas las partes", consideró Houry.