Pilar fundamental del armado de Cambiemos que le posibilitó a Mauricio Macri llegar a la Presidencia, el radical mendocino Ernesto Sanz reapareció en medio de las versiones que lo ubican próximamente con un cargo en la Casa Rosada, salió a pegarle duro a la oposición y fue filoso al hablar de la corrupción en el kirchnerismo.
“Hace cinco años le ponían Néstor Kirchner a todo, a una escuela... Ahora, algún legislador del kirchnerismo tendría que proponer ponerle Néstor Kirchner a la cárcel de Ezeiza. Lázaro Báez, José López, Jaime, Milani... La verdad es que coparon la penitenciaría, o sea que algunos presos hay. Le podrían poner Néstor Kirchner porque sería un emblema. Eso significa que la Justicia, de algún modo en ese nivel de funcionarios ha actuado. A mi juicio, me gustaría que hubiera actuado mucho más rápidamente”, sentenció Sanz.
En diálogo con el programa Sábado Tempranísimo, de Radio Mitre, dio su opinión sobre la polémica en torno a si empresarios extranjeros supeditaron inversiones en el país a que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner vaya presa.
“Estuve en España y hablé con muchos empresarios. Nunca escuché que alguien dijera que quería invertir si ponían presa a Cristina Fernández de Kirchner. Están mirando el rumbo”, subrayó.
Respecto de la ex Presidenta, puntualizó: “El Gobierno no ha influido, ni influye ni influirá para que Cristina Kirchner deje de estar en libertad. Es la Justicia la que tiene que definir eso y se tiene que definir con juicios orales”.
El ex senador mendocino también habló del paro del 6 de abril. “Todos saben que es un paro irracional. Lo saben hasta los propios miembros del triunvirato de la CGT, que en privado lo dicen pero en público obviamente, después de lo que pasó en el palco, tienen que bancar un paro entre dientes”, consideró y apuntó al “peronismo sin liderazgo”.
“El problema en la Argentina es la distinción entre liderazgo y simple dirigencia en el ámbito político, gremial, empresarial... Los líderes son los que se animan a transformar, (a tomar) el camino menos previsible, el más difícil. Los simples dirigentes se suben a la agenda para hacer política, en lugar de hacer política para cambiar la agenda”, resaltó.
“Si el modelo de liderazgo sindical es Baradel y el prototipo de la líder social es Milagro Sala, no hay crecimiento económico que nos saque adelante”, consideró uno de hombres más cercanos a Macri.
“El Gobierno está demasiado solo para transformar el país porque hay mucha dirigencia de todos los ámbitos, política, empresaria y sindical, que lo deja solo al Gobierno. Es más fácil ponerse en la vereda de enfrente, diferenciarse del Gobierno”, analizó el dirigente radical.
En ese marco, reconoció decisiones desacertadas de la gestión que encabeza Mauricio Macri: “Sí, por supuesto, en el Gobierno hay errores. Pero nadie podrá meter en la lista de errores que este Gobierno no dialoga, que se encierra en sí mismo”.
Sobre las especulaciones que lo ubican en el futuro en el Gabinete de Macri, sentenció: “Yo formo parte del equipo de Gobierno sin ser funcionario, ministro ni nada. Me siento muy útil, tratando de aconsejar, estar presente cuando se discuten temas importantes”.
Y remató: “No siempre estar en la función pública define la participación de una persona”.
