No hace mucho tiempo, Stephanie Heller, una agente de bienes raíces en Nueva Jersey, salió de su gimnasio después de ejercitarse y vio a una mujer en el estacionamiento batallando para agacharse. "No sé si se le cayó algo y tenía que recogerlo o si tenía desamarrado un zapato", afirmó Heller, pero se agachó solícita para ayudar. La mujer culpó a su edad de su incapacidad, y explicó que tenía 70 años, pero Heller tenía 71.
"A esta mujer le pesaba cada uno de sus años", recordó. "Yo no dejo que la edad me detenga. Creo que es un estado mental en realidad", confesó.
Todos tenemos una edad cronológica, la cantidad de años que celebramos, pero algunas personas de 50, 60 ó 70 años se ven y se sienten jóvenes, mientras que otras no. Los investigadores pueden medir estas diferencias analizando los biomarcadores relacionados con la edad: aspectos como la elasticidad de la piel, la presión arterial, la capacidad pulmonar y la fuerza de agarre. Las personas con un estilo y condiciones de vida saludables, además de una herencia genética afortunada, obtener la puntuación de “más jóvenes” en estas evaluaciones y se dice que tienen una “edad biológica” menor.
No obstante, hay una manera mucho más sencilla de determinar en qué estado están las personas. Se le llama "edad subjetiva".
Cuando los investigadores preguntan "¿De qué edad te sientes la mayor parte del tiempo?", la respuesta suele reflejar el estado de salud física y mental de las personas.
"Esta sencilla pregunta parece ser especialmente poderosa", comentó Antonio Terracciano, un profesor de geriatría en la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Florida en Tallahassee.
Los científicos están descubriendo que las personas que se sienten menores que su edad cronológica, por lo general, están más sanas y son psicológicamente más resilientes que las que se sienten mayores. Éstas obtienen mejores resultados en tareas relacionadas con la memoria y tienen menores riesgos de presentar un deterioro cognitivo. En un estudio publicado en 2018, un equipo de investigadores surcoreanos examinó el cerebro de 68 adultos mayores saludables y descubrió que quienes se sentían más jóvenes tenían una sustancia gris más gruesa y habían sufrido un menor deterioro relacionado con la edad. Por el contrario, las personas que se sienten mayores a su edad cronológica tienen un riesgo mayor de ser hospitalizados, de padecer demencia senil y de fallecer.
"Hemos descubierto muchísimas asociaciones predictivas", afirmó Yannick Stephan, un asistente de docencia en salud y psicología del envejecimiento de la Universidad de Montpellier en Francia quien ha dirigido investigaciones sobre la edad subjetiva.
Si tienes más de 40 años es probable que te sientas más joven que lo que sugiere tu licencia de conducir. Según Stephan, eso sucede con aproximadamente 80%de las personas. Un pequeño porcentaje de la población (menor al diez por ciento) se siente mayor. La discrepancia entre la edad que sienten tener y la que tienen en realidad aumenta con los años, según Terracciano. A los 50, las personas pueden sentir que tienen unos cinco años menos, es decir, 10% más jóvenes, pero cuando cumplen 70 años, podrían sentirse 15 ó 20% menores.
La mayor parte de las investigaciones acerca de la edad subjetiva está basada en asociaciones entre la edad que las personas consideran tener y su estado de salud, así que no puede determinar una causa y efecto. Por ejemplo, no está claro si sentirse joven ayuda a las personas a mantenerse saludables o si quienes ya están saludables tienden a sentirse más jóvenes.
Para Francisca Mercado-Ruiz de South Plainfield, Nueva Jersey, volverse saludable transformó su percepción de la edad. Durante los meses previos a su cumpleaños 49, en diciembre pasado, cumplió con su meta de bajar 22 kilos. Antes de adelgazar sufría dolores de espalda y cadera y se sentía de 65 años. Ahora ha dejado de tomar su medicamento para controlar la presión arterial, está llena de energía, tiene unos cuantos achaques y dice sentirse de 35 años.
¿Qué provoca que la edad subjetiva sea un predictor tan poderoso? Stephan cree que las personas tienen información intuitiva acerca de sus capacidades físicas, agudeza mental y estabilidad emocional, lo cual queda sintetizado en un único número significativo.
No obstante, los críticos aseguran que, para muchas personas, la edad subjetiva solo refleja las obsesiones culturales con la juventud. David Weiss, psicólogo del desarrollo de la Universidad de Leipzig, asegura que la gente cultiva una identidad de menor edad para eliminar los estereotipos de fragilidad y senilidad. Weiss comentó que: "Si la vejez no tuviera un valor negativo, no habría necesidad de decir que te sientes más joven".
En efecto, según Weiss, en las culturas que respetan a la gente mayor por su sabiduría y experiencia, las personas ni siquiera comprenden el concepto de edad subjetiva. Cuando un alumno de licenciatura de Weiss hizo una investigación en Jordania, la gente con la que habló le decía: "Tengo 80 años. No sé a qué te refieres cuando me preguntas de qué edad me siento".
Paradójicamente, la gente mayor podría expresar sentimientos de cariño hacia su generación aunque, al mismo tiempo, sientan aversión hacia sus coetáneos. En un experimento de 2012, Weiss y un colega dividieron a 104 personas de entre 65 y 88 años en dos grupos. Todos ellos debían completar cinco oraciones, pero a los miembros de un grupo se les pidió que describieran a las personas de su edad, mientras que al otro grupo se le pidió que hablara de su generación.
El primer grupo escribió cosas como: "La gente de mi edad es temerosa y se preocupa por el futuro" y "La gente de mi edad con frecuencia habla de sus enfermedades". El grupo orientado hacia la generación mostró un mayor sentido de empoderamiento y significado. Ellos escribieron cosas como "La gente de mi generación formó parte de los del '68, el grupo que fundó una sociedad más civil" (refiriéndose al movimiento de protesta estudiantil de finales de la década de 1960) y "La gente de mi generación debería transmitir su experiencia de vida a la juventud". Weiss sugiere que una forma de combatir el envejecimiento internalizado es identificándonos con nuestra generación.