Los modelos de equipos fueron modernizándose al paso de las guerras mundiales. Recién en 1954 surgieron los primeros fabricantes de material de montaña en Mendoza, que, con la producción de carpas, bolsas de dormir y equipos de duvet, cambiaron para siempre la historia del andinismo. El guía de montaña Mauricio Fernández, en su libro “Aconcagua. La Cima de América”, detalla el equipo actual para una ascensión:
Bolsa de dormir de duvet
(mínimo recomendable 1 kg de duvet). Existen telas que repelen la humedad y evitan que la pluma absorba la humedad. Colchonetas aislantes: algunos combinan un aislante con un colchón de aire. Mochila de estilo expedición, es decir de 80/90 litros. Tiendas de altura. Piqueta de estilo clásico. Grampones. Bastones de trekking. Indumentaria de trekking.
Accesorios
: lámpara frontal, reloj (altímetro-despertador), botiquín personal, termo, crema protectora solar, lápiz de protección labial. También gorro para sol, vajilla, cortaplumas, calentadores a combustible líquido o a gas. Radio handie y bolsos de carga.
Indumentaria:
para garantizar el aislamiento necesario para los pies se utilizan dos pares de medias y botas dobles de montaña, que traen un botín interior y otra bota exterior. Para las manos: guante interior sintético de trama fina y resistente a la abrasión. Mitones aislantes: de duvet o alguna fibra sintética, y cubre mitones.
En el cuerpo
: primera capa compuesta de pantalón y camiseta interior. segunda capa: un buzo intermedio, también conocido como interior grueso. Luego, una tercer capa compuesta por un tejido polar. Luego, un elemento de gran aislamiento, como una chaqueta de duvet de buena calidad y, por último, una chaqueta cortaviento.
En la cabeza
: Se combinan dos pasamontañas o valaclavas -uno fino y otro grueso- y una capucha de duvet y otra capucha rompevientos. Para la cara, pasamontañas y algunos usan una máscara de protección facial de neopreno cuando hay fuertes vientos. Además, gafas protectoras y unas antiparras de tempestad.