El presunto suicidio de Jeffrey Epstein en una prisión federal desató una avalancha de teorías de conspiración en internet que, movilizadas por los vínculos del magnate a príncipes, políticos y otras personas famosas y poderosas, pueden dar que hablar durante años.
Muchos manifestaron especulaciones, incluyendo algunas que fueron retuiteadas por el presidente Donald Trump, de que la muerte de Epstein no fue un suicidio.
Esas versiones se basan en la conjetura que resurgió tras el arresto de Epstein el 6 de julio, luego de ser acusado de encabezar una banda de tráfico sexual para que le proveyeran muchachas adolescentes.
Algunas de las personas que lo acusan aseguran haber sido abusadas sexualmente por amigos y conocidos del acaudalado financista.
Teorías conspirativas
Esa combinación creó un terreno fértil para que surgieran teorías de conspiración y desinformación en Facebook, Twitter, YouTube y otras redes sociales.
Epstein murió el sábado 10 de agosto a los 66 años. Estaba preso luego de que le negaran la fianza y enfrentaba hasta 45 años de prisión por cargos federales de tráfico sexual y asociación ilícita, según divulgó la fiscalía. Se había declarado inocente y estaba a la espera de su juicio.
Su relación con el presidente Donald Trump, el ex presidente Bill Clinton y el príncipe Andrés de Gran Bretaña eran el centro de rumores y teorías conspirativas, muchas de las cuales cuestionan lo que los políticos sabían sobre los presuntos crímenes sexuales de Epstein.
Otras teorías, sin embargo, han sido fácilmente desmentidas. Por ejemplo, días después de su arresto se publicaron memes y notificaciones en Facebook que alegaban equivocadamente que el gobierno de Barack Obama, para proteger al ex presidente Bill Clinton, había llegado a un acuerdo secreto en el 2008 en Florida que le permitió declararse inocente de procurar a una joven para propósitos de prostitución.
El acuerdo que luego fue hecho público fue concretado antes de que Obama asumiera la presidencia, durante el gobierno de George W. Bush.
¿Cómo hizo?
Investigadores indagan desde hace mucho las acusaciones de abuso sexual y asociación ilícita contra Epstein. El presunto suicidio añade otro misterio: ¿cómo fue que murió en su celda?
Se inició otra investigación luego de que la Oficina Federal de Prisiones dijo que Epstein fuera hallado inconsciente en su celda en Manhattan. Su muerte abrupta trunca el caso que preparaba la fiscalía y que hubiera podido poner al descubierto los tejes y manejes del financista exitoso que estaba bien conectado con celebridades y presidentes. De todas maneras, promete seguir investigando.
Epstein había sido puesto bajo vigilancia luego de que hace poco más de dos semanas lo encontraran con moretones en el cuello, según una fuente no autorizada para hablar del caso públicamente. Pero cancelaron la vigilancia a fines de julio, por lo que al momento de su muerte no estaba siendo monitoreado.
Una fuente policial dijo al New York Times que Epstein estaba solo en su celda la noche en la que aparentemente se quitó la vida.
La fuente, al tanto de la investigación, dijo que el compañero de celda de Epstein había sido transferido.
El secretario de Justicia William Barr dijo que quedó "horrorizado" al enterarse que Epstein había muerto bajo custodia federal. "Crea interrogantes serios que necesitan respuestas", comunicó.
La investigación federal sobre las acusaciones siguen su curso, dijo el fiscal federal Geoffrey Berman. La acusación incluye un cargo de asociación ilícita, y otras personas podrían enfrentar cargos.
Los guardias de la unidad en la que Jeffrey Epstein se encontraba detenido estaban trabajando turnos extremos de horas extras para compensar la falta de personal la noche en que el financista aparentemente se suicidó. Uno de los guardias de la unidad llevaba cinco días en fila trabajando horas extras y otro de los custodios estaba en horas extras obligatorias, dijo la fuente al tanto de las operaciones del Centro Correccional Metropolitano.
El personal de la prisión no cumplió con los protocolos antes de la muerte de Epstein, según el The New York Times, lo que agudiza las repercusiones de lo que llevó al aparente suicidio del reconocido financista con importantes conexiones políticas.