Entrevista exclusiva a Maná: “No hay que quedarse callado”

Maná está de vuelta en Mendoza. Vienen a celebrar sus 30 años de carrera y al mismo tiempo a presentar en vivo “Cama incendiada”, el álbum ganador del Grammy Latino. Los mexicanos están más críticos que nunca, rodeados de una atmósfera política y de recon

Entrevista exclusiva a Maná: “No hay  que quedarse callado”

Esta es una temporada de reconocimientos y de reacción política para Maná.

Por un lado, el 10 de febrero, los mexicanos se convirtieron en la primera banda de música de América Latina en poseer su propia estrella en el icónico Paseo de la Fama de Hollywood. Fueron presentados por Carlos Santana rodeados de varias personalidades latinas de la farándula estadounidense. Todo un honor para ellos.

Antes, en noviembre, en el momento de recibir un galardón en los Latin Grammy como "mejor álbum" por "Cama incendiada", ellos aprovecharon el micrófono para expresar su disconformidad por la candidatura del millonario Donald Trump y dejaron en claro un mensaje muy contundente; "no votar a racistas".

La atrevida y aplaudida  intervención en la gala repercutió en el ambiente musical siguiendo la línea discursiva de lo que de un tiempo parece ser una cruzada humanista que también ha involucrado a otros temas polémicos en el continente.

Estas demandas de hecho continuaron esta semana, cuando el mismo Fernando Olvera difundió un video por la cuenta de Twitter de Lilian Tintori, la esposa del líder Leopoldo López, reclamó justicia: "Pedimos la liberación inmediata de Leopoldo López y los 75 presos políticos que hay en Venezuela".

En esa oportunidad, el cantante afirmó que "Maná siempre ha defendido los derechos humanos" y manifestó que "no es posible ni justo que a estas alturas haya encarcelados por pensamiento, por ideología".

"No hay que quedarse callado", me interrumpe Sergio Vallín, al recordar aquella noche del Grammy, mientras descansa en un hotel de Asunción de Paraguay.

En sus 43 años, él le ha dedicado 22 a ser el violero de Maná y trata a sus compañeros (Fernando Olvera, Juan Calleros y Alejandro González), como hermanos, como familia.

- ¿Cómo se sienten por volver a la Argentina?

Sergio Vallín: -Siempre para nosotros es un placer volver a tocar en Argentina. Nos encantan sus geografías, sus comidas, la gente, todo. Sabemos que un público muy musical y tenemos muchos amigos allá que queremos y músicos con lo que hemos compartido innumerables repertorios.

- ¿Cómo es la convivencia durante las giras en el año que cumplen 30 años de trayectoria?

- Esta ha sido siempre una relación muy bonita. Si pensamos en el hecho de que es inusual que las bandas duren tanto tiempo pero en el caso nuestro básicamente lo que nos ha mantenido unidos es el amor entre nosotros. A pesar de ser cuatro personas muy diferentes nos complementamos y sabemos hasta qué punto lo que hagamos es siempre para beneficio de la banda. Eso es muy importante.

- ¿Qué canción es tu preferida del disco nuevo?

- Lo que pasa es que hemos pasado varias etapas de la banda para llegar a este álbum. Cada una con un recuerdo maravilloso. En los primeros años están aquellos hits que el público adoptó como clásicos como "Rayando el sol", "Vivir del aire", canciones que están vivas desde hace veinticinco años y que todavía pasan en las radios y nos llenan de alegría.

Y ahora con este nuevo disco hay canciones que me mueven mucho a mí en particular como "Mi verdad", "Peligrosa", "Telaraña". Creo que cada tema tiene su magia o bien sabes que en la marcha de las giras se van nutriendo de experiencias y las personas van encariñándose con ellas.

- ¿En el show cómo han pensado repartir las canciones nuevas y las clásicas?

- Si bien vamos a promover el nuevo disco hemos pensado repartirnos en los recuerdos de estos más de veinte años de repertorio. El plan es volver al Maná de antes, por lo que seguro van a estar canciones de nuestros primeros discos. Hay muchos repertorio, por lo que queremos hacer una especie de montaña rusa intensa para transmitir un movimiento cambiante de emociones. La idea es tener un encuentro íntimo, cercano, como lo que siempre hemos tenido en realidad, pero ahora mejor acompañado con luces, pantallas, pasarelas.

- ¿Qué es lo que nunca olvidás poner en el equipaje de viaje?

- En mi caso llevo guardadas varias fotografías de mi familia y está fijo que lleve una guitarra, obvio. Tengo una preferida, pero voy cambiando de vez en cuando. Creo que en mi caso mi amiga más fiel ha sido la guitarra.

Sergio es un fanático del instrumento. Les encantan las Fender Stratocaster, Gibson Les Paul, Fender Jazzmaster, Gibson ES-335, Epiphone Casino, las  Jackson, Gretsch Tennessee Rose, Rickenbacker 360/12, las Gibson, Fender Showmaster, incluso una personalizada, la Lloyd Prins SV1, que se le construyó el luthier californiano Lloyd Prins.

- ¿Hay un músico argentino que a vos te ha resultado influyente para tu carrera?

- Argentina es uno de los países más musicales que existen.  No nos olvidemos que Soda Stereo sigue recordándose como una de las bandas más vanguardistas del rock en español. A Cerati lo admiré muchísimo, de igual modo que admiro a Luis Salinas. Además, acordate que hay una banda de Mendoza que yo quiero mucho que son Los Enanitos Verdes. Marciano, que vive en México, es un buen amigo mío y de hecho, hace poco estuve con él. Los Enanitos son una banda muy querida por nosotros.

- ¿Cómo está tu relación ahora con el Centro Cultural México Contemporáneo?

- A mí siempre me ha llamado la atención ayudar a los chavos. Darle una ayuda a los chicos que les interesa la música. Creo que la educación es algo fundamental en general. En la música es lo mismo, aunque cuenta acceder a los medios. Sabemos que un instrumento cuesta dinero. Eso de aprender a tocar guitarra es algo que se tiene que hacer de chico si uno ha pensado hacer una carrera con ella.

Hay que alimentar esa contención para aquellos que están entusiasmados para aprender música. Eso realmente es algo a lo que no le pierdo entusiasmo. Es un granito de arena que estoy poniendo con muchísimo gusto.

El Tour 2016 ya se inició en Asunción de Paraguay el jueves pasado y continuará por las ciudades de Mendoza (el próximo miércoles en el estadio Independiente Rivadavia), Capital Federal, Rosario, Córdoba, Tucumán, para después terminar  en escenarios de Montevideo y Coquimbo, en Chile. 
Luego de su visita por el sur, la banda planea volver a Estados Unidos en setiembre y octubre, un tour que los devuelve al territorio político en el país del norte, para finalizar justo en las fechas de las elecciones presidenciales el 8 de noviembre.

La ficha

Maná en vivo.
Hora:
22.
En: estadio Independiente Rivadavia (avenida Las Tipas 800). 
Día: miércoles 24 de febrero. 
Precios: $ 2.000 ; 1.100 ; 940 ; 770 y 500. 
Punto de venta y retiro de entradas: Disquería Le Club  (San Martín 950) y el website: topshow.com.ar.

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