Mañana comenzará en los Tribunales mendocinos el sexto juicio por jurado en la provincia. Dos hermanos y otro hombre se sentarán en el banquillo de los acusados y enfrentarán el veredicto popular, como sospechosos de matar y quemar a un joven en Godoy Cruz, hace dos años.
Esta causa se esclarecerá bajo la reciente modalidad, pero no tiene las características de la mayoría de los casos resueltos por los ciudadanos, que en tres de los cinco debates se han enfrentado a crímenes en el contexto de parejas. Los restantes fueron el asesinato de los policías Daniel Ríos y Jorge Cusi y el homicidio de José Álvarez en un asalto.
La víctima en este nuevo juicio es Leonardo Lucero (24), cuyo cadáver fue encontrado en el Oeste de Godoy Cruz la mañana del 12 de julio de 2017, en una zona cercana a un parque de descanso. El cuerpo estaba en un zanjón, carbonizado y mutilado.
La identificación de los restos tardó varios días ya que el hombre tenía prácticamente todo el cuerpo quemado. Peritos lograron rescatar huellas y así supieron de quién se trataba. Las mutilaciones fueron provocadas por animales del lugar.
Un par de meses les llevó a los investigadores atrapar a los primeros dos detenidos: Mariano Gutiérrez y Rafael Yáñez. Tiempo después caería el hermano de éste último, de nombre Abel.
La investigación sostiene que el móvil del hecho respondería a deudas vinculadas con la venta de drogas, que habría tenido la víctima con uno de los sospechosos. Lucero vivía en Godoy Cruz y trabajaba como cuidacoches en Ciudad.
Los acusados fueron imputados por homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía. Este delito tiene la pena única de prisión perpetua y por esto serán juzgados por un jurado popular, que para declararlos culpables debe conseguir un fallo unánime.
El fiscal Gustavo Pirrello lideró la investigación y durante el debate lo acompañará Fernando Guzzo, fiscal en jefe de Homicidios. Como juez actuará Eduardo Martearena y el proceso se extendería por lo menos hasta el miércoles de esta semana.