En su debut como candidata a presidenta, Cristina Kirchner se propuso un objetivo interno: sacar más votos que Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires. El ex motonauta también debutaba, para gobernador. Compartían boleta. Pero la entonces primera dama no quería sombras en su salto al escenario mayor. No pudo ser. Scioli la superó por casi 100.000 votos. La revancha vino en 2011. El bis de ambos dejó a Cristina por encima. No sólo en tierra bonaerense. La reelección presidencial vino con récord a nivel nacional: 54,11% de los votos. Insuperable desde el retorno de la democracia en 1983.
Tras el excelente resultado en las PASO del 11 de agosto, donde consiguió el 49,49%, Alberto Fernández muestra un repunte en algunas encuestas, donde Mauricio Macri también podría crecer desde sus 32,93 puntos. Polarización al extremo.
El diario Clarín accedió a dos nuevos estudios que sostienen la hipótesis. Uno le da al candidato del Frente de Todos una intención de voto para la primera vuelta de 53,3%, pero sin proyectar un 2,6% de indecisos. El otro sí hace esa cuenta y lo estira a Fernández hasta 56,3%.
¿Es posible un salto tan grande entre las primarias y la elección general? En 2011, Cristina lo hizo. En las PASO sacó 50,24% y en la primera vuelta, el mencionado 54,11%. La pelea era distinta a la actual. En realidad, no había pelea. En las primarias, el segundo, Ricardo Alfonsín, obtuvo 12,20%. En la general, Hermes Binner lo superó y creció a un 16,80%. Derrota digna.
Ahora, aunque lejos, Macri sostiene la idea de forzar un balotaje. La decena de encuestas que vio Clarín desde el 11 de agosto presentan hasta el momento como complicadísimo ese objetivo. Pero los consultores vienen de pifiarle feo en las PASO.
Los dos últimos estudios
Proyección es una consultora creada hace poco más de un año y medio, y una de las que mejor pronosticó las PASO en la Capital Federal. La integran sociólogos de la UBA y también realizaron mediciones para elecciones locales, la Provincia de Buenos Aires y la Nación.
Entre el 9 y el 14 de setiembre, Proyección hizo un relevamiento de 1.200 casos, on line, con un margen de error de +/- 3,5%. En su medición de intención de voto incluye un 2,6% de indecisos y no los proyecta. Por eso, los porcentajes que les otorga a los seis candidatos que quedaron en pie tras las PASO podrían crecer.
En cuanto a Fernández, le otorga una intención de voto de 53,3%, contra 31,9% de Macri; la diferencia de 16,56 puntos de las PASO se amplía a 21,4. Completan Roberto Lavagna con 7,1%, Nicolás del Caño 3,5%, Juan José Gómez Centurión 1,1% y José Luis Espert 0,5%.
El otro trabajo que se difundió en estos días es de Gustavo Córdoba & Asociados, uno de los consultores que mejor pronosticó el resultado de las PASO. Vaticinó una ventaja de 9,3 puntos para Fernández.
Después de las primarias y antes de que termine agosto, Córdoba publicó un primer sondeo de cara a octubre. Entonces, ya pronosticó que la diferencia podría ampliarse a más de 20 puntos.
En su nuevo estudio, de 1.200 casos telefónicos IVR (con máquina automática), relevados el 13 y 14 de setiembre y con un margen de error de +/- 2,83%, muestra mayores distancias. Tantas, que sin y con proyección de indecisos, Fernández superaría en la historia a su compañera de fórmula: 54,5% y 56,3% respectivamente. ¿Y Macri? Obtendría 31,8% y 32,7%.
Más allá de que el postulante del Frente de Todos no llegue a ese récord, ya con sus números de las PASO quedó en el top five de los más votados desde la vuelta de la democracia, por detrás de la propia CFK, Alfonsín y Menem.