Larry Ely Murillo-Moncada desapareció el 28 de noviembre de 2009 después de discutir con sus padres. Se había dirigido a un supermercado en Iowa, Estados Unidos, donde trabajaba, pero nunca regresó a casa e inició una búsqueda para encontrarlo. Diez años después, lo encontraron muerto detrás de una heladera.
Si bien el comercio cerró hace tres años, fue en enero pasado cuando los contratistas se dieron cita en sus instalaciones para remover los frigoríficos, estantes y demás muebles. El hallazgo fue terrible: el cadáver de Larry en absoluta descomposición, en un diminuto espacio de 45 centímetros.
El cuerpo fue retirado por los médicos forenses, que le practicaron pruebas de ADN que contrastaron con las de los padres de Larry. El resultado fue positivo y se confirmó que el joven desaparecido hace una década falleció dentro del supermercado, sin rastros de violencia, indicó Infobae.
Al parecer, Larry estaba enojado por la pelea con sus padres y hace diez años subió al congelador para permanecer un tiempo a solas, pero resbaló y cayó de poco más de tres metros de altura.
"Es tan fuerte (el ruido del frigorífico) que probablemente no hay forma de que alguien lo escuche", reconoció Brandon Danielson, sargento de Policía de Council Bluffs.
En tanto, varios de los clientes dijeron que siempre percibieron un olor horrible dentro del comercio, en especial donde localizaron el cadáver de Larry Ely Murillo-Moncada, pero sus reclamos habían pasado desapercibidos.