El juicio que se sigue a Julieta Silva por la muerte del rugbier Genaro Fortunato, ocurrida la madrugada del 9 de septiembre del año pasado a la salida del boliche Mona Bar en San Rafael, entró en la etapa de alegatos pero sumará un día más ya que la defensa de la joven presentará sus argumentos mañana.
Durante la jornada de este jueves la querella y la fiscalía esgrimieron sus argumentos y sus pedidos de sentencia, una tarea que quedará en manos del tribunal que podría dar su veredicto este viernes o más tardar el lunes próximo.
Son tres las carátulas alternativas del caso, si se tiene en cuenta las dos con que arrancó el debate: "homicidio culposo agravado", "homicidio simple con dolo eventual" y "homicidio agravado por el vínculo y emoción violenta". La otra posibilidad es que sea absuelta, lisa y llanamente o por la duda, de cualquiera de las tres acusaciones.
La fiscalía ya pidió 14 años de prisión efectivo por "homicidio simple con dolo eventual" por emoción violenta.
Después de las 15.30 fue el turno de la querella que hizo su exposición donde solicitó al tribunal que se la condene por homicidio agravado por el vínculo y como alternativa otorgue una pena de 20 años de prisión y se revoque la prisión domiciliaria.
El siguente en la lista de alegatos era la defensa de Silva, pero solicitaron al tribunal exponer sus argumentos mañana viernes. La querella protestó pero el tribunal hizo lugar al pedido del abogado de la joven acusada y finalmente la defensa hará su exposición este viernes.
Si los tiempos y el tribunal lo consideran adecuado también podría haber sentencia en el caso. De no ser así el veredicto sobre este resonante caso pasará para el próximo lunes.
Esa fatídica madrugada Julieta y Genaro llegaron al boliche a bordo del auto de la mujer. Poco antes de las 5 de la mañana dejaron el local bajo una lluvia persistente. Genaro –según los videos de la puerta de Mona Bar– estaba ebrio. Ella había bebido, pero en menor cantidad.
Discutieron al llegar al auto que estaba estacionado sobre calle El Chañaral. Finalmente Julieta se hizo cargo de la conducción, pero el joven intentó disuadirla desde afuera del vehículo y corrió a la par del auto hasta que se cayó al piso en el medio de la calzada.
Julieta arrancó sola con dirección al Norte. A los 150 metros hizo un giro en "U" y volvió hacia donde estaba su novio. Un cuidacoches que esa noche trabajaba en el lugar dice que le hizo señas a la mujer para que frenara.
Genaro estaba en el piso y la mujer lo arrastró más de 3 metros hasta que se detuvo. Cuando se bajó vio el cuerpo de su novio sin vida en medio de la calzada: le había aplastado la cabeza.