A pesar que el consumo de cemento ha caído un 7,5% en el interanual de febrero, las fábricas parecen no percibir esa realidad. De hecho, contrario a lo que sucede con los precios en un negocio de oferta y demanda -valores estables o en baja- el precio del cemento continúa manifestando señales de aumento.
Según explicaron desde la Cámara Argentina de la Construcción (CAC) -Filial Mendoza- el cemento viene incrementándose de manera escalonada desde noviembre, cuando lo hizo en un 11%; en diciembre 5%; en enero 6% y a partir del 22 de este mes, lo hará otro 6%. Esto marcaría un alza en 2016 -en sólo dos meses- del 12% y demora las construcciones.
Asimismo, desde corralones y ferreterías de Mendoza, contaron que actualmente una bolsa de cemento portland se ubica alrededor de $ 112, aunque con los incrementos, este material podría llegar a valer en marzo $ 120, teniendo en cuenta además la suba del dólar -que hasta el cierre de esta edición llegó a valer $ 14,90-. No obstante, indicaron que las subas se vienen manifestando desde 2015, cuando la bolsa valía en febrero del año pasado $ 71,38, lo que marca un aumento del 56,9%.
Para Héctor Cattaneo, de la Subcomisión Hormigón Elaborado de CAC Mendoza, los incrementos desproporcionados aplicados por las empresas fabricadoras de uno de los principales insumos de la construcción, no tienen un justificativo. “Podemos aludir, que luego del fin del cepo el precio del cemento se eleve, pero estamos convencidos de que hay más especulación que otra cosa. Es por esto que creemos conveniente que el aumento de febrero no se haga efectivo, ya que los costos están siendo cada vez más altos”.
Estimó además el empresario que este año, frente a la quita de subsidios y la movida del dólar, 2016 termine con una suba mayor a la de 2015. Cattaneo explicó que más allá de que las cementeras tienen algunos justificativos -como ser la escalada del dólar frente al peso y los costos altos de luz y gas- no todo esto argumenta ese porcentaje. Por ejemplo el flete -que también ha mantenido subas- debe ser pagado por las empresas que venden cemento al consumidor final y no por las fábricas.
Por su parte, Jorge Sanchís, quien está al frente de la Cámara, sumó además que “en marzo esperamos otro incremento, teniendo en cuenta el impacto que tendrá la quita de subsidios de energía para las cementeras”.
Construcciones más caras
Frente a esto, los empresarios manifestaron que estas subas tendrán un impacto lógico en las obras de edificación, donde alrededor del 30% del costo de una vivienda corresponde a este material, el cual es utilizado en las diversas etapas, como en los pisos, firmes, acabados, etc.
Atilio Calzetta, presidente de la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza, estima “que el alza también está dada porque son pocas las empresas proveedoras de este material”.
Asimismo, Hugo Gamboa, del Colegio de Constructores de Mendoza, remarca que “las alzas estuvieron más pegadas a una cuestión de especulación, de no saber en qué valor se iba a ubicar el dólar y cómo iba a continuar su comportamiento al alza de costos de las cementeras”.
Monopolio y contagio
Según coincidieron los corralones y ferreterías que venden este producto, no hay explicación a tantas alzas y lo atribuyen a que el cemento está monopolizado. Cuando dos empresas deciden el incremento, luego lo hacen las otras.
Recordemos que las cementeras son Holcim Argentina, firma que opera en Capdeville, Las Heras, y la que concentra el mercado en Mendoza. Luego está Avellaneda (proveedora en Mendoza, ubicada en San Luis y Buenos Aires), Loma Negra -la más grande del país- y Petroquímica Comodoro Rivadavia (de Chubut).
Finalmente, tanto para las Cámaras Empresarias como los corralones, es importante la vuelta de Precios Cuidados de la Construcción, el cual quedó suspendido el año pasado, y el gobierno nacional -hasta el momento- no ha dado anuncios al respecto, de la reactivación. Es que según explican, por medio de este plan, por “lo menos los consumidores tenían precios de referencia”.
Aumentos
Según estimaron desde diversos corralones y ferreterías consultadas por Los Andes, los incrementos mensuales parecería ser la nueva metodología de cómo están trabajando las cementeras.
Desde el corralón Benenati, su propietario confirmó el incremento. Allí, el precio que tiene la bolsa es de $ 112, cuando el año pasado, en esta misma fecha estaba a $ 70. Según precisó, las subas no están impactando sobre la demanda. No obstante, observan la preocupación de la gente, que mes a mes ven subir este material primordial para la construcción.
En tanto, desde Red Minetti, detallaron que los ajustes de este producto se dan en una empresa y luego las demás copian los valores.
“A nosotros, una semana antes nos avisan que el pedido vendrá con incrementos. Por lo cual no nos queda otra que ir haciendo lo mismo”, remarcó el empresario.
Similar fue la descripción de Balcarce Materiales, donde ofrecen la bolsa de contado a $ 110, mientras que financiado se eleva a $112.
Los directivos de una reconocida empresa proveedora de materiales de construcción manejan valores similares a las demás compañías pero, sin embargo, contaron que con todas estas alzas, sumado a las posibles que habrá luego de la quita de los subsidios, es de esperar que en el corto plazo la bolsa de cemento se ubique en los $ 120. Coincidieron con estas declaraciones, corralones de Mendoza.
Retraso en obras
Por estos motivos, es que Hugo Gamboa, del Colegio de Constructores de Mendoza, advirtió que se han retrasado las obras -principalmente privadas-.
El directivo explicó que hasta el momento lo único que está funcionando son la construcción de vivienda familiar y, en su gran mayoría, las que tienen como fondo el Procrear.
En base a esto, y a los incrementos, no sólo del cemento sino también de otros materiales, es de esperarse que las obras se ralenticen y en muchos casos no se terminen.