Santiago Maldonado pasó un tiempo en Mendoza hace un par de años donde generó vínculos y dejó muestras de sus trabajos. Aldana (23) es una de las mendocinas que lo conoció y lleva en su espalda un tatuaje que diseñaron juntos y él le realizó.
En diálogo con Los Andes la chica recordó que lo conoció en la plaza Independencia de Ciudad: "Tenía una libreta con sus dibujos, los vendía o los cambiaba, también eran diseños para sus tatuajes".
Ella se mostró interesada en ese momento: “Vi que tenía los dibujos y como yo también soy artista me acerqué, entonces hablamos de diseñar algo juntos para hacerme un tatuaje. Yo no tenía plata, entonces me dijo que veíamos y lo cambiamos por una campera que él necesitaba”, relató.
El diseño que resultó es una lupa que sostiene una mano donde se ve el universo. Como es un tatuaje grande involucró varias sesiones. Incluso, charlaron sobre la posibilidad de diseñar en conjunto un mural que no llegaron a concretar.
Mencionó que en sus tatuajes era extremadamente detallista, repasaba una y otra vez las líneas para que fuesen bien marcadas, usaba mucho los colores y le gustaba que estos resaltasen.
Pudieron charlar tranquilos y “de todo”, rememoró Aldana. El joven había llegado en bicicleta, con la que viajaba por todo el país.
En cuanto a sus costumbres, contó que era vegano y hacia diez años que no consumía ningún producto derivado de animales. Además, usaba medicinas naturales que él mismo elaboraba con plantas de la montaña.
Le llamó la atención que siempre estaba acompañado porque se hacía fácil de amigos. "Era muy tranquilo, de esas personas que te hablan calmado, con tono de voz bajo; me pareció alguien impresionante por el hecho de viajar solo en bicicleta, estar comprometido con luchas sociales y en la defensa de los animales", recordó la joven.
No es la única que recuerda el contacto con el joven de quien no se sabe nada desde el 1 de agosto y por el que está en vilo todo el país. Germán Leyens, presidente del Centro Cultural Israelita, indicó en una entrevista con radio Nihuil que el artesano era un joven de sólidos principios pacifistas y que fue muy amigo de sus hijas.
Vecinos de Godoy Cruz también recuerdan haberlo visto. El joven se hizo amigo de una familia de la zona. Dicen que se enamoró de una chica y que se hizo muchos amigos. A varios los tatuó y muchos marcharon el miércoles a la tarde.
Respecto de la situación en torno al caso, Aldana dijo sentir un cúmulo de sensaciones entre la pena, la impotencia y la bronca: “No puede una persona estar y de repente no estar más”.
Cuestionó la falta de información fidedigna y la diversidad de versiones, y destacó la gran necesidad de saber qué sucedió cuanto antes. Por eso participó de todas las otras marchas que se realizaron en Mendoza con la misma intención: preguntar dónde está Santiago Maldonado.
Kerchner: que actúe la Justicia
En el gobierno de Alfredo Cornejo, el primero y único en hablar hasta ahora sobre el caso Maldonado fue el ministro de Economía, Infraestructura y Energía, Martín Kerchner.
El funcionario dijo que “como todos los argentinos quiero que se sepa la verdad” aunque señaló que “no hay que especular y hay que dejar todo en manos de la Justicia”.
“Escondiéndonos las verdades no mejoramos porque no sabemos dónde estamos parados”
“Queremos saber la verdad de Maldonado, como la verdad de la desocupación, de la pobreza, de la inflación. Es importante para poder salir adelante”, reflexionó.
