La fuerte tormenta que precipitó en la noche del miércoles sobre la zona Este, afectó especialmente al departamento de Santa Rosa, donde cayó granizo acompañado por un fuerte viento. Los distritos más afectados son La Dormida y especialmente Las Catitas, donde hubo caída de árboles, rotura de viviendas y daños en los cultivos que, en algunos casos, alcanzaron al 100 por ciento de la producción.
“Lamentablemente tuvimos dos tormentas muy fuertes: la primera fue cerca de las 21 en zonas de Las Catitas y Catitas Viejas, una región muy productiva del departamento y donde hemos tenido pérdidas de hasta el 100 por ciento en muchas fincas”, comentó el intendente Sergio Salgado aunque, hasta el momento, la comuna no ha podido precisar la magnitud del daño.
“La segunda tormenta fue cerca de la una y media de la mañana en La Dormida y nos dejó daños de considerable magnitud, con caída de árboles y cortes de luz”, agregó el intendente y señaló que más de 30 familias debieron ser auxiliadas por daños severos en sus viviendas.
Las fincas se vieron afectadas por el granizo, con centenares de hectáreas perdidas en hasta un 100 por ciento de cultivos, especialmente de vid, según afirmó el intendente Salgado. Ayer, decenas de productores concurrieron a la comuna y a las delegaciones para comenzar con los trámites de denuncia y asistencia.
José Antonio Vidal tiene 91 años y su finca está ubicada a la salida de Las Catitas: “La piedra nos llevó todo. Todavía no me he animado a entrar por el callejón pero desde acá se ve que no quedó nada”, se lamentaba ayer el hombre: “El año pasado también nos agarró una tormenta y sólo pudimos sacar 300 quintales de uvas. Los otros 900 quedaron tirados, para que se los comiera la mula”. Vidal supuso un tiempo difícil por delante: “El granizo no sólo me llevó la producción sino que también me dañó la casa. Hoy se llueve por todos lados”.
En tanto, en el pueblo, uno de los casos más graves ocurrió en Las Catitas, donde en la mañana del miércoles se prendió fuego la casa de Alfredo Alanís, un vecino de la zona de Los Lotes que vive con su esposa y dos hijos. “El fuego empezó en el dormitorio y no pudieron apagarlo. Perdieron casi todo”, comentó un vecino y, a la noche, la tormenta agravó más el cuadro.
En Las Catitas, las hojas de los árboles cubrían las calles del pueblo y, en todos lados, la gente aseguraba que pocas veces habían presenciado algo similar.
“Estaba sola en la casa y le juro que me entró miedo. Me metí en la pieza y me puse a rezar porque el ruido del granizo y del viento era ensordecedor. Me daban ganas de llorar”, recordó Ilda González, mientras amontonaba con la escoba las hojas desparramadas por la vereda de su casa, en el barrio La Costanera.
Cerca de allí, el granizo perforó el techo de una vivienda y a pocas cuadras, el viento logró voltear el tinglado frente a un comercio; un poco más allá, los daños en la plaza distrital habían dejado casi una postal de invierno y en las calles, decenas de árboles y ramas se habían venido abajo.
“Nunca vi algo igual. Nací y me crié en Las Catitas pero jamás vi una tormenta tan fuerte y con piedra tan grande”, dijo Alejandra Gamboa y contó que el granizo precipitó en seco durante casi diez minutos.
Productores locales recibieron maquinaria
Productores de San Martín y Tunuyán vieron ampliada su capacidad productiva gracias a que cuentan con nuevos tractores viñateros e implementos suministrados a través del programa Maquinaria Agrícola Comunitaria, se informó oficialmente desde el Ministerio de Agroindustria de la provincia.
De acuerdo con el comunicado, los productores de San Martín pertenecen al distrito El Ramblón y se trata de 11 viñateros que administran propiedades pequeñas (3,5 hectáreas promedio) en un radio de 8 kilómetros. Los integrantes del grupo compartirán un tractor marca John Deere 5045 y una atomizadora Pehuenche de 600 litros.
El programa Maquinaria Agrícola Comunitaria, dependiente del Ministerio de Agroindustria y Tecnología, se puso en marcha en 2011, está destinado a fomentar el asociativismo de los pequeños productores vitícolas de la provincia, mejorar la mecanización de sus unidades productivas y disminuir los costos operativos.